La niebla se nos levantó

 Uno de los mejores espectáculos de este viaje fue cómo la niebla se levantó y se hizo la luz, como en el Génesis o mejor. Ved los colores y comprobad el subidón de ánimo que nos produjeron al pie de la Roque de Saint Cristophe.

                                   había unos caballos por allí.

Y también pasó esta pareja de viajeros, puede que holandeses, aunque llevaban bicicletas eléctricas. 

Había unas cabras de raza como antigua. Los franceses son muy listos, así limpian la zona, aparte de que "hacen bonito", y seguramente además, darán cabritos.

Esta luz significaba que debíamos retroceder a Lascaux para estar allí a las 12,30 y saber qué es lo que vinieron a ver aquellos japoneses.

                         colores de hierba que estaba segando un tractor, olía muy bien.

Por el camino de vuelta el sol refrendaba el "levantamiento".

Pero todavía pararíamos en otro sitio más antes de llegar a Lascaux