miércoles, 27 de julio de 2016

Europa.

No sé si en los próximos años se seguirán realizando campeonatos de selecciones de fútbol en Europa. Francia ha pagado la última organización con vandalismo y destinando recursos de seguridad, tan perentorios, al asunto de vigilar las manadas de pendencieros que les llegaron. Y Francia, que es un país rico y bien organizado, estaba desbordada.
Pero es Europa la que está desbordada por el terrorismo islámico. Pronto nos tocará otra vez en España, porque seguro que hay musulmanes radicales, radicados en "al Andalus" dispuestos a no ser menos ni  dejar solos a sus "hermanos" inmolados en los otros países.

Por cierto... No sé cómo la policía francesa tuvo que abatir a los dos musulmanes que, armados solo con cuchillos salieron de una iglesia donde acababan de cometer la "heroicidad" de degollar a un anciano de 84 años, (el cura de la iglesia) para grabarlo y escarnecer a los cristianos, o excitar a su "tropa". La cuestión que planteo es que si solo tenían machetes o espadas, ¿no hubiera sido factible rodearlos y desarmarlos, con palos, porras, escudos... o  dispararles a las piernas etc?
¿O ya nos estamos embruteciendo como ellos?

Supongo que a Europa se le acaban los miramientos a la hora de detener, a la vez que la solidaridad con el mundo musulmán que huye. Una cosa es mantenerlos y albergarlos y otra consentir que vengan a matarnos con toda esa saña de que son capaces.
Cuanta más solidaridad prestemos a la pobre gente, más votos a la extrema derecha. Hoy mucho más. Aquí si que se cumple una reacción en cadena.
Ahora está "caliente" la máquina; con esta excitación, cualquiera que quiera inmolarse "por" el estado islámico tiene un hueco en las portadas de los  informativos. Y gente de esa, sobra. Incluso pueden salir imitadores de esas locuras en otras parcelas ideológicas.

Creo que a la ETA se la derrotó no solo porque aparecieron estos terroristas de verdad que buscan matar indiscriminadamente y, preferiblemente, morir en el intento, sino porque necesitaban muchos medios para garantizarse el alojamiento la huida, información para seleccionar objetivos y no fallar, incluso tenían un sueldo. Necesitaban comunicarse por medios modernos y controlar. Eso estaba en nuestras manos, (o en las de Estados Unidos)
Pero con esta otra gente basta la mera voluntad y un camión para matar 84 personas, (pero con un coche también se pueden matar a diez o doce en cualquier paso de peatones un poco concurrido. Y lo puede hacer cualquiera en cualquier momento ¿Cuántos musulmanes están conduciendo ahora mismo en Europa?) Y no necesitan nada más.
Si esta locura dura un año seguido veremos partidos que propugnarán la caza indiscriminada del musulmán y caravanas de deportados a algún estado que los admita, Siria, o algún otro paupérrimo de África.
No sé si los europeos somos capaces de soportar un año seguido de terror como estas últimas semanas, pero estoy seguro de que "ellos" sí. Estamos en guerra.
De momento seguiremos siendo europeos, defensores de los derechos humanos, solo nos queda la estadística para no encontrar la muerte; no nos va a tocar precisamente a nosotros. Pero a medida que se nos aproxime el terror, o se generalice, nos iremos desmoralizando.
Veremos que solo es cuestión de cuánto nos acerquen la sangre y contemplaremos como nuestros principios se oscurecen como una gota de café que cayera sobre un azucarillo.
Por cierto, la planta del café proviene de Arabia.

jueves, 21 de julio de 2016

Cazadores de gamusinos.

Supongo que la comparación ya la habrán hecho otros. Perdón por saturar un poco la actualidad más rabiosa, que es el juego Pokemon Go y no la rabia del tunecino de Niza que alquiló un camión para atropellar gente real, compulsivamente, como si fuera un videojuego.
es un gato, no un "Picachu"

A los ingenuos, los "espabilaos" que quieren reírse les llevan a cazar gamusinos, que es una realidad virtual anterior a la realidad virtual electrónica. No sé si debo meter al quijotesco Clavileño en esta explicación.

El caso es que una buena parte del mundo civilizado, aprovecha los güifis y gasta los datos de sus teléfonos inteligentes en esta bobada que siempre fue cazar gamusinos, Y la gente pierde su tiempo conscientemente. Es una estafa mayor que otras, porque el estafado es feliz en la semiconsciencia de la tontería. Como si no hubiera nada más inteligente que hacer. Al ver fútbol, que es otro sumidero de tiempo útil, a veces uno escucha algún jugador o entrenador inteligente, a veces aprende lo que no se debe decir ni hacer, es algo más incierto y más articulado, más humano.... (que tenga yo que hablar bien del fútbol)

Esto es una droga social: nos entontecen simplemente y evitan que pensemos, aprendamos, o creemos.

Creo que ya he perdido demasiado tiempo en esto. Perdonad por lo que os hice perder con estos párrafos. Mi hija hizo un video parodiándolo cuando aún no se podía descargar el juego. https://www.youtube.com/watch?v=8LLylLIDaA8  La empresa  jugó con la ansiedad de los potenciales jugadores retrasando su aparición. Los resultados económicos y de expectativas son un éxito rotundo. Los "listos" se ríen de los cazadores de gamusinos.

Es el mundo que tenemos: seguramente ahora mismo ya hay gente buscando gamusinos en  el paseo marítimo de la playa de los Ingleses de Niza. Yo lo prohibiría, y no solo en esa playa. En todos los sitios públicos; por salud pública mental.

lunes, 18 de julio de 2016

El problema de Francia en dos pinceladas.

-I-
Solo he estado una semana en París. Me gustó mucho. Desde entonces amo a Francia mucho más que la amaba.
Me sorprendieron varias cosas. La gente tiene más hijos que aquí: veíamos familias de tres y cuatro niños jugando con los padres en los parques. Da envida. Creo que el Estado subvenciona la maternidad.

En el bulevar de los Campos Elíseos hay bancos donde sentarse. Nosotros no nos sentamos pero pasamos varias veces por allí. El 80% estaban ocupados por mujeres magrebíes vestidas a la musulmana de marrón oscuro, con sus niños y también sus maridos barbudos -entiendo que sin trabajo- algunos con chilaba. Los trabajos de la zona -comercio de lujo- los ocupan los muy blancos y los custodian elegantísmos negros. Por allí llaman la atención las mujeres del Golfo Pérsico con sus tarjetas de crédito infinito y sus criados y guardaespaldas que cargan con los paquetes. Son anchas las aceras pero necesitarían mucha más anchura para separar esos dos mundos. Creo que unos -magrebíes franceses pobres, reproduciéndose- chupan del estado del bienestar mientras -quizá- admiran, curiosean, quizá hasta odian al espectáculo. Porque esas mujeres del golfo pérsico son un derroche de espectáculo derrochador.  

-II-
Hace unos años en mi trabajo judicial me tocó llevar alguna documentación francesa a un emigrante retornado. El documento en francés había sido traducido al español por un traductor jurado francés, era una basura de traducción literal, palabra a palabra. El receptor, que además sabía francés perfectamente, se indignó. Inmediatamente buscó como un hurón el nombre del traductor firmante para cerciorarse de su sospechas, era de origen musulmán. Lo que me dijo de los moros no es para escribirlo aquí.
Cierto es que el traductor seguramente había tomado una traducción automática por ordenador y no se había molestado ni en mirarlo, o había asumido que podía traducir al español sin conocer nada de nuestra lengua: un grave desprecio, un abuso, corrupción en suma.
Pero al destinatario le gustó saber que era de apellido musulmán para indignarse más a gusto. Es un síntoma.

Desde hace tiempo hay fuertes odios cruzados. Supongo que a los atentados le seguirán réplicas del otro lado. No voy a decir que "eso va a acabar muy mal", porque ya he dicho que tardará en acabar.

viernes, 15 de julio de 2016

EL TERRIBLE SIGLO QUE NOS ESPERA

Despierto con los 84 muertos de Niza. Un hombre francés, de origen tunecino, ha tomado un camión y lo ha lanzado contra la multitud que veía los fuegos artificiales de la fiesta nacional francesa. Después ha sido abatido (este verbo ya tiene una única connotación: alguien que después de realizar una masacre es matado por las armas de la policía).
En la radio se hablaba de que había voces que pedían que no se difundieran las imágenes, "porque eso es lo que los terroristas quieren para cosechar más adeptos". Puede ser. Pero lo que más adeptos les ha dado en las últimas semanas es el que se haya desvelado oficialmente el cambalache del "trío de las Azores" que, capitaneado por George W Bush, decidió que tras la masacre de las Torres Gemelas  no le bastaba con tumbar el régimen talibán de Afganistán, -que se hizo con el consentimiento prácticamente mundial-,  sino que podían aprovechar para merendarse un país con muchas reservas de petróleo y repartirlo entre los negociantes petroleros que le apoyaban. Esa guerra. iniciada en 2003, en la que aún estamos, puede que dure un siglo, (por decir una cantidad redonda de años lo he puesto en mi título) puede que más y puede que menos, pero no se va a acabar pronto.
Aquello es cierto; si alguien es directo y franco son los norteamericanos blancos. El hermano gobernador de Florida, Jeff Busch, vino a España a decir públicamente que podíamos hacer NEGOCIO en la reconstrucción, que nos lo habíamos ganado. NEGOCIO, LO DIJO CON ESAS PALABRAS. Poco después batimos el récord europeo de terrorismo con 195 muertos en los trenes de Atocha. La guerra de Irak (creo que la primera) fue definida por el fanfarrón de Sadam Hussein como la "madre de todas las batallas" y ha acertado, porque la de ayer en Niza es una de sus hijas.
La guerra de Irak fue la primera guerra contemporánea semiprivada, había una empresa de seguridad: "contratistas" que actuaban como un poder paramilitar. Se trataba de repartir un pastel de yacimientos petrolíferos, y con ese tesoro las empresas constructoras españolas podían hacer una parte de las nuevas viviendas, puentes y diversas obras públicas. Los americanos se quedaban con el petróleo y la seguridad. El trío Bush, Cheney, Ransfeld, alguno accionista de esa empresa paramilitar de contratistas de seguridad, haría el negocio del siglo.
Pues es el patinazo del siglo. Los americanos se han ido de allí después de 4.000 muertos, con montones de soldados traumatizados psicologicamente y algunos convertidos, que se activarán con armas en la mano y las usarán para lo que fueron concebidas, para matar gente.
Perdió la Razón o perdieron las fuerzas de la "Razón" occidental en Irak; y se pierde o se empata, pero no se gana en Afganistán, pueblo rebelde, (quien mucho abarca poco aprieta) se pierde en Siria, esto es mérito de Obama y de la herencia de Bush, un estado fallido contamina al vecino. A cambio tenemos refugiados, que muchos efectivamente terminarán de terroristas, porque no sabremos integrarlos en Europa y  soñarán melancólicamente su pasado robado de dicha y felicidad como una injusticia, -que lo ha sido y que lo es-
Con ese agravio, que será rumiado a cada gesto de discriminación que padezcan, hay odio para varias generaciones.

Porque ¿quien contratará hoy a un musulmán en Francia, en Bélgica, en Suecia, en Alemania?, si son alimañas que te la van a liar en cuanto puedan.
Todo se complica porque vivimos en un mundo interdependiente, nos montamos en un ascensor que ha sido revisado por personas en cuyas manos dejamos nuestra vida, comemos cualquier alimento envasado y lo comemos pensando que no nos pueden envenenar, lo mismo sucede con el agua de las ciudades, con las centrales nucleares, con los militares o guardias de seguridad armados...
Todo el mundo sabe cómo matar. A un técnico de ascensor le dicen "ten cuidado con esto porque si no el ascensor podría caer sin avisar y matarías a mucha gente", un empleado de una fábrica de salchichas tiene que tener cuidado con que no se infesten de botulismo o de que no lleven veneno, el agua, las centrales nucleares, las policías y ejércitos...  Podría seguir dando ejemplos, pero ¿cuántos empleos de ese tipo están ocupados en Europa, sobre todo en Francia, por musulmanes?

Son "sus muertos y nuestros muertos", hoy, aquí, todos somos Niza, pero antesdeayer ninguno fuimos Bagdad o Bangla Desh; en su mundo se producen masacres que nosotros los occidentales no sentimos igual, pero los musulmanes sí, y es otro agravio que no estamos tratando bien.

No tengo la solución. De lo que estoy seguro es de que, conscientemente, no me montaría en un avión francés que fuera pilotado por un musulmán. Ya paso demasiado miedo al descender para aterrizar.
Por supuesto que no son todos, ni la mayoría; que debemos confiar, que la paranoia es peor... Pero ellos, los terroristas, matan con lo que pueden, todo lo que pueden. Anoche con un camión. La imaginación es casi infinita.
Recordemos a Indira Gandi. Ella mandó entrar a sangre y fuego en el santuario de los Shijs. Le dijeron entonces que retirara de su escolta a un Shij. Ella dijo ese hombre lleva muchos años conmigo, le conozco y no me hará nada. La mató en cuanto pudo. Porque Ellos viven -y mueren- la religión de otra manera. No son todos, ni siquiera la mayoría, pero estos sucesos harán que se agraven las cosas. No es ningún caso aislado. Muchos más no matan porque no se sienten capaces.

Mi padre dice "Cuidadme del toro manso, que del bravo ya me cuido yo". Al fiero estado Islámico se le derrotará militarmente, con tanques, aviones y drones; es cuestión de medios.  Lo peor es la gente que está entre nosotros, y que se ha compartido todo nuestro estado del bienestar y nuestro alcohol y hasta nuestra pornografía. Y cuanto mejores personas -más mansos- sean, peor, porque sentirán más injustas las injusticias que comentamos sobre ellos ¿quién contratará hoy un técnico de ascensor musulmán aunque sea el mejor, o un técnico nuclear, un piloto de avión...? Pues mucha de esta gente que va a ser excluida, y recordemos que  no tiene otro sitio donde ir, nacieron en Francia y son franceses, o belgas, o españoles (recientemente ganaron el campeonato de Europa de Atletismo de los cinco mil metros lisos dos españoles de origen magrebí) y no conocen la polvorienta tierra de sus padres, donde poco hay que hacer, más que de unas vacaciones, o por foto.

No tengo solución para ello, a mí no me valen las cámaras de gas, ni las deportaciones masivas ¿adonde?. Solo cabe que la democracia y los valores de la razón a los que hemos llegado con la filosofía en occidente, puedan triunfar a medio plazo, mediante la educación y el ejemplo, en las mentes de esta gente. Pero si solo les ofrecemos discriminación, y además corrupción y rapiña, estaremos transformándoles en especies invasivas que acabarán físicamente con nosotros y nuestro entorno.



Para otro día dejo la narración de dos experiencias que aprecié personalmente sobre la situación de los musulmanes en Francia.

martes, 12 de julio de 2016

Simpatía

Palabra que viene del griego y que significa "comunidad de sentimientos" también recoge otra acepción  la Real Academia "modo de ser y carácter de una persona que la hacen atractiva o agradable a los demás".

Me visitó en Candelario mi amigo internáutico y trasatlántico, Miguel Grillo Morales. Y es eso: simpatía; un hombre que la derrocha, como si tuviera un manantial. La vida le habrá hecho sufrir como a todo el mundo, pero en balance le ha tratado bien, tan bien como merece, con una gran familia y muchos amigos, con los que él se vuelca. Ahora mismo está en Pamplona disfrutando de esa comunidad de sentimientos en torno al toro y la fiesta. No creo que quienes le conocen, (y están siguiendo sus retransmisiones por Facebook de su periplo), conciban ningún lugar más apropiado para Miguel que los sanfermines. Seguro que pega la hebra y mastica chascarrillos con cualquiera que se encuentre. Porque es un tipo esencialmente atractivo, magnético, en su humor. En su estancia en Madrid fue a ver el museo del Real Madrid y su personalidad, su manera extrovertida con las cosas o las personas, no pasó desapercibida para una periodista de la casa, que le hizo una entrevista para la televisión del club. Lógicamente se la harán a bastante gente, para eso están allí. Pero en este caso la entrevistadora acertó: a mí no me cabe duda de que la emitirán, porque seguro que les ha salido divertida.

El humor es una de las más altas formas de inteligencia, y a la vez la más democrática. Solo compartimos la risa con una persona que consideramos "tan" inteligente como nosotros mismos, y cada vez que tratamos de hacer humor pretendemos rayar a la mayor altura con nuestro ingenio. Aunque sea un viejo chiste, es la oportunidad de compartir la inteligencia "capacidad de entender o comprender" de ese momento; de hacer fiesta del ingenio.
La vida tiene momentos de apretar los dientes, de caerse, de intentar y no conseguir levantarse, de rabia, de dolor, de impotencia. Mucha gente soporta la desgracia de casi nunca salir a flote de estos círculos viciosos, pero algunas personas consiguen que la vida les compense con sobresalientes de amor, de placer, de ternura, de goces estéticos, de humor, de música...; estos son los momentos festivos, los que nos elevan de todo lo sórdido y trabajoso. Miguel Grillo Morales nos ofrece a sus muchos amigos frente al concepto general de hombre de diario, el paradigma del hombre festivo.


Llevo 3 años en Candelario y nunca, hasta que di una vuelta con Miguel Grillo, había encontrado a este hombre tan simpático que nos estuvo deleitando con sus explicaciones y chistes. Fue  el magnetismo de su presencia, no cabe duda.

martes, 5 de julio de 2016

Lucimiento (los milagros no se explican, se admiran)

Béjar es una ciudad que fue importante en la economía. Casi todos los niños tienen un par (algunos los cuatro) de abuel@s que trabajaron en la industria textil. Hubo dinero de bolsillo para los obreros y obreras; más dinero -de caja fuerte- para los empresarios, de manera que se habló y aún se recuerda de los ricos de Béjar. Esto coincidió en el tiempo con el auge del género de la zarzuela. En los años 20 desde este lugar hasta se tuvo el capricho de encargar a un compositor y a un libretista una: La bejarana. Supongo que el sentirse protagonistas del género, el que tradicionalmente haya habido dinero -del grande y del chico- para pagar las visitas a las compañías que turnaron también por el humilde teatro Cervantes, dejó plantadas racies de árboles tan vigorosas que, a pesar de muchos pesares, aún retoñan.
Sigue habiendo público, y sigue habiendo afición para ensayar en otoño, invierno y primavera; invertir horas, empeños, para unas cuantas horas de lucimiento. Cada uno con lo que le da su magín artístico, de solista o de coro, todos apuntalan, (si me apuras, más los del coro que los solistas, que éstos bien se lo cobran en aplausos individuales) una orgullosa tradición colectiva.

Espectáculo que no es capaz de levantar la capital, tan cultural, ni sumando todo su gran alfoz, Salamanca, lo hace esta ciudad estrecha y de larga decadencia, poblada básicamente por unos millares de jubilados y jubiladas que trabajaron mucho en el siglo XX para cobrar su pensión contributiva: Gran orgullo femenino, base y sostén del milagro.

¿Qué vendrá, después?. El bosque de zarzas, fresnos y castaños que nos cerca, se adueñará de las piedras, desmontará las casas y los jabalíes serán un día la cima de la  cadena trófica. Para entonces la arqueología de los siglos venideros, se sorprenderá con que todavía en el 2016 los bejaranos eran capaces de edificar una zarzuela de fuste y con todos sus aditamentos. (notable alto de nota media, pero este año sobresaliente el vestuario)

Yo no sabría explicarlo, pero juro que lo he visto; y estoy por perjurar que cada vez luce mejor, este milagro.
http://salamanca24horas.com:8080/bejar/03-07-2016-la-zarzuela-los-gavilanes-triunfa-en-el-cervantes


PD A Cari Argente Pereira, hada madrina.

lunes, 4 de julio de 2016

Sobre la legalización de más drogas.

Soy contrario; sospecho que  ya lo habré escrito aquí.

En ocasiones se dice que no es justo que el estado nos trate como a niños, que somos adultos.
Yo creo que no es cierto que todos seamos adultos, cívicos, responsables  y respetuosos en todo momento. Basta mirar a nuestro alrededor.

Yo vengo todos los días andando por esta deliciosa carretera que lleva ce Béjar a Candelario. A veces recojo de las cunetas  bolsas vacías de aperitivos y cajas de plástico de pastelitos, aunque nunca faltan latas de cerveza o refrescos. Son deshechos que la gente arroja desde los coches. 

Estoy convencido que esas personas que cómodamente tiran sus desperdicios a la cuneta en lugar de llevárselas en el coche y depositarlos en un contenedor, comprenden que no debe hacerse. Seguramente ahora hay algunos que no lo hacen porque temen que les pueden pillar y ser multados (se les quita hasta puntos del carnet de conducir). Y creo que si se decidiera retirar esa norma punitiva alguna  gente se relajaría y volvería a tirarlo por la ventanilla

Creo que las leyes son y deben ser más exigentes, inflexibles con nosotros que somos nosotros mismos. Las leyes también sirven para educar. Afean lo que está mal, y lo que permiten, de alguna manera, lo autorizan, lo refrendan.

Voy a poner otro ejemplo:
Existen muchos gastos (a veces por estos caprichos ha habido muertes para los rescatadores) causados por montañeros o aficionados a deportes de riesgo. Seguro que todos criticamos esos gastos y esos riesgos cuando se materializan. Incluso lo critican personas que más tarde, por exceso de confianza, cometerán una imprudencia que les cause una lesión grave y haya que emplear un muy costoso helicóptero para el salvamento.
Creo que debería haber una legislación restrictiva, una licencia (con su correspondiente curso de aptitud) educativa y un seguro obligatorio para ser montañero, que se haga cargo de esas contingencias. Porque a veces van a la montaña personas inconscientes. Y quien no lo tenga que pague una multa. Solo así solemos aprender.


Después de dar el paso de legalizar tenemos que ser conscientes de que tendríamos que admitir una sociedad más drogada causando más gastos de salud física y de psiquiatría, por ejercer lo que desde entonces habríamos considerado un derecho. ¿Podría fumarse un porro (solo uno) el conductor de un autobús infantil?

Estoy de acuerdo que no se puede luchar radicalmente de frente contra las drogas establecidas en las sociedades, el vino, la hoja de coca masticada, etc. La prueba de que eso no funcionó fue la "Ley Seca". En España actual el consumo de alcohol se ha reducido porque cada vez es más caro y porque a la gente le gusta más la libertad y comodidad que proporciona montar en coche y se paga carísimo ir bebido. Parecidos inconvenientes tiene el tabaco. Es el camino. Acosar y sacar de la tradición las sustancias nocivas para la salud. Pero sin pasos atrás.

Mi admirado Fernando Savater ha sido siempre uno de los apóstoles españoles de la legalización de todas las drogas, aún las duras. Yo le tengo como un ciudadano ejemplar, y le reconocería la capacidad de usar cualquier cosa, drogas, armas, porque lo haría siempre como un adulto, pero la mayoría de la gente no es Savater.



viernes, 1 de julio de 2016

La pared y la espada.

¿Qué hacer con los británicos ahora? El 51 y pico por ciento nos han dicho que nos da la espalda, que se marchan de nuestros sitios comunes, de nuestra solidaridad, de nuestra fiesta. Creo que, por lo menos, hasta el siglo XXII esta marcha es irreversible.

Ahora ¿qué hacemos?, ¿desmontamos rápidamente todo y les ponemos de patitas en la calle para que se enteren bien de que nos han desairado? o somos magnánimos, cariñosos y reconstrucitvos, teniendo en cuenta a ese 48 y pico por ciento que nos querían, y  nos portamos mejor con ellos que ellos con nosotros.

La verdad es que tienta el considerarlos a todos como esos ingleses desdeñosos, que ya empiezan a acosar a sus inmigrantes, en una escuela española de un barrio rico de Londres han aparecido pintadas llamándoles "manada de extranjeros".
Las venganzas y contravenganzas terminaron tradicionalmente en guerras. Mejor no empezarlas porque los "comunitarios" hasta podríamos aprovechar para dar un escarmiento apuntándonos a abonar el secesionismo de Escocia, para que se todos los que juegan a estas cosas se enteren de lo que vale un peine, y aprendan con una amputación o desestabilización nacional.
Pero eso es un juego peligroso, en fútbol hay una figura así que no permite levantar la pierna por encima de cierta altura. Y mi madre dice que "un mal no remedia a otro"

Tenemos mucho que perder y algo que recuperar como naciones europeas comunitarias: ahora estaremos más unidos al paso de Alemania y Francia, al núcleo duro, político y económico.  Celebrémoslo, eso puede ser hasta positivo.

El Brexit lo han ganado los nacionalistas, muchos maleducados,  incultos, brutos, desdeñosos, altivos. Pero si obramos con orgullo y vamos a degüello contra todos los británicos, lo pagará caro mucha gente nuestra y suya. Espero que la razón y la humanidad gobiernen en las mentes de los gobernantes y de los gobernados.

Creo en el divorcio, un divorcio legal, lo más rápido posible, pero civilizado. Es muy malo que a una panda de hooligans se le ponga enfrente otra panda de hooligans, pero lo peor es que los gobernantes empezaran a actuar como hooligans.
Así que firmeza y templanza.