Acabo de oír por la radio "no compartas informaciones no verificadas" se refería a lo que dicen supuestos expertos en el Covid, pero vale para cualquier cosa, aunque la gente sigue compartiendo lo que más le apetece a su tripa "de" compartir.
Alguien manda unas cartas con balas y toda España hablando de ello una semana. ¿A quién ha beneficiado? Entre tanto un esquizofrénico diagnosticado manda una navaja abierta con gotitas de pintura a una ministra, pero pone su remite en la carta, franqueada con 2,50 euros. Nuevas cartas de balas. El pim pam pum de la feria. ¿Cuántas se habrán mandado o estarán mandándose a la espera de repetir el éxito: ¿Cuántos tontos o listos no están dispuestos a que hablen de su ocurrencia por 2,50 euros?
Hoy Pablo Iglesias denuncia que en algunos sitios de Internet la gente escribe cosas que incitan al odio sobre él. Pero sabe que pueden decir lo mismo muchos políticos, todos, los vivos y los muertos. Desde que se inventó este invento, todo el mundo hace, escribe inventa y comparte estas "informaciones". Esto es la pandemia, Todo el mundo quiere llamar la atención y las redes sociales nos gustan más que a "un tonto una tiza"
Cuando yo era joven si un tonto se hacía con una tiza se ponía a escribir tonterías en las paredes, pero la que todos los tontos solían escribir era esta " TONTO EL QUE LO LEA" Y era la verdad, se trata de saber leer las tonterías, saber las que lo son, y saber que internet es el actual "habitat" de los tontos de la tiza.
Si elevamos a noticia lo que los tontos, o los listos que se hacen pasar por tontos, pretenden que sea (y más en una campaña electoral) nos internamos en una pandemia intelectual, ciénaga, muladar, manicomio. Voy a poner un reciente enlace de la campaña electoral que se está haciendo: