miércoles, 6 de diciembre de 2023

No sé si se puede decir que hay muchos comunistas en nuestro gobierno.

Creo que son comunistas los de Bildu, al menos lo eran los de ETA, también hay unos cuantos en SUMAR y también en Esquerra ¿o no habrá comunistas entre los nacionalistas catalanes de izquierda?

No me creo el comunismo, y voy a dar unas razones nuevas, aunque supongo que ya se habrá utilizado alguna vez la expresión polisémica española "servicios públicos". Como ciudadano de a pie he tenido que pisar charcos más de una vez en ellos. Afirmo que si en mi casa últimamente casi todas veces me siento en la taza por eso de que no se escape ninguna chispita, en los servicios públicos no lo he hecho nunca. Porque las cosas públicas, las de todos, no las tratamos bien (el género humano europeo en general) y lo dice uno que ha meado bastante en España, Francia, Portugal y Roma.

Es un clásico decir lo mal que se mea en París, lo verifiqué en 2015. Te cobran en muchos sitios, aunque también los encontramos gratuitos, en alguno de ellos un servidor estuvo a punto de vomitar. Lo de los charcos y los papeles derramados, servicios atorados, y los clásicos cuadros de Jakson Pollock, dentro y fuera, con variedades aleatorias de marrón, secos y recientes: es peligroso París en verano, conveniente sudar mucho para no tener que expulsar líquidos desde la vejiga. 

Por supuesto estoy seguro de que todos cuidamos mucho en nuestra casa privada, y en nuestra segunda casa, que son los hoteles, de apuntar bien y limpiar la cosa para que no suceda eso de "huele, y no a ámbar" que decía don Quijote.

En todo lo público siempre he procurado ser lo más cívico posible, pero mucha gente no lo es y por eso las cosas están así. Y así sucedió en el experimento sociopolítico más importante del siglo XX, el comunismo se vino abajo en Europa.

No sé si habréis parado en algún área de descanso de las autovías españolas, yo nunca, si puedo evitarlo: la gente tira allí de todo, (suele haber muchas compresas usadas y restos de envases y alimentos de todo tipo) aunque esté prohibido, y se alivian en cualquier sitio. En Francia hay muchas menos autovías, pero  las autopistas privadas ofrecen áreas de descanso como éstas, donde se puede comer, hay mesas, contenedores de residuos de todos los colores y los servicios están limpios y mantenidos por lo menos en esta zona https://www.a63-atlandes.fr/es/areas-de-descanso/ Los franceses (y visitantes) no es que sean guarros, son más descuidados cuanto más pública es la cosa.

No se me ha ocurrido nunca tratar con mujeres públicas, dicen que algunos van a ellas porque son más libres de hacer lo que les dé la gana que con su mujer privada.

Todos deberíamos comprender que no se puede pasar por el centro de un pueblo a gran velocidad, pero si no hay advertencias o semáforos, multas o "resaltos" mucha gente pasaría a cien por hora por esas vías públicas.

Cada uno cuida bien de lo suyo. El presidente Pedro Sánchez cuida bien de su sillón porque lo considera suyo, pero la convivencia, los jueces, el déficit público, la Constitución que hoy ¿celebramos? le importan tanto como los servicios públicos más enmerdados de París.



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