Yo he visto a veces en diferentes lugares a jóvenes bestias con potentísimos coches dar acelerones despreciando su vida y la de los demás, me estremece esa violencia y me entra un miedo cerval; así debió ser la brutalidad en este caso, aunque hay quien dice que pasaron deliberadamente después de tirarlos de la lancha a rematarlos un par de veces. Son tremendos los comentarios de quienes lo grabaron y publicaron en las redes.
Y un bar-restaurante que estaba al pie de la carretera donde comía mucha gente. Atraídos por el evidente éxito paramos, pero por ese mismo éxito había que esperar mucho y renunciamos. El sitio se llama El Paquete.
A pesar de que el mar canta paz y enamoran sus brillos.
Pero Barbate es mucho más que eso, a mí me suena mucho a uno de los repetidísimos chistes de Chiquito de la Calzada. La localidad, por ejemplo, también tiene un pequeño puerto pesquero; interpreto como redes las montañitas de color que podeis ver.
Aquel acantilado puede ser el cabo Trafalgar, tan famoso en el mundo por una plaza, y en la literatura española por el primer Episodio Nacional.
A pesar de que el mar canta paz y enamoran sus brillos.
Toda la hermosura que vimos en el litoral barbateño está sucia de sangre en el imaginario español de ahora mismo, pero estaba sucia de narcotráfico y nosotros no lo sabíamos, quién sabe si hubiéramos presenciado algo o nos confunden con policías de pasiano. No creo que la próxima vez que pasemos lo miremos igual.
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