Aquí presento dos esquelas una en gallego donde se ruega "prégase non envíen flores" y otra que lo pone en español.
La familia no recibe duelo y se ruega no envíen flores. Mejor dejar las cosas claras, un compromiso llama a otro compromiso, y si se cortan ahorramos todos. Mi padre, que trabajaba en el cementerio, odiaba las coronas porque las dejaban encima del hueco donde tenían que montar el monumento funerario, y le tocaba ir a tirarlas a la basura. (Son un gesto de notoriedad que caduca cuando la comitiva funeraria se da la vuelta y vuelven a sus casas).
Algo que tienen en común los del litoral cantábrico, gallegos asturianos, vascos y santanderinos, es la fuerte emigración a América, de la que algunos volvieron ricos y se hicieron un palacete para demostrarlo. Aquí en Ribadeo hay una calle que se llama de los indianos.
No entendí el significado de los gigantones. Pero sí veo ahora que en la esquina de la izquierda abajo hay unos hierros, para atar las bicicletas que allí se aparquen.
Creo que este es el ayuntamiento donde supongo estaban extendiendo una alfombra roja para una boda civil de un poquito de postín.
Nos encontramos una iglesia cerrada pero que tiene a sus puerta unas huchas para limosnas, por las ánimas.
"Pan de los pobres"- "San Antonio" -"Beca Parroquial"- Milagroso San Nicolás.
Pero los de Cáritas se han puesto al día en el tablón de anuncios.
Aprovechan un antiguo embarcadero de mineral para que los turistas lo paseemos y fotografiemos.
Y también para esta sugerente instalación.
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