MANIFESTÉMOSNOS YA CONTRA EL EL BOMBARDEO A SIRIA.
Interrumpo la narración de mis impresiones gallegas por este
asunto urgente. Desde el pasado fin de semana están haciendo circular un video
muy malo, una perfromance bastante barata, que, al parecer, ha difundido una
senadora norteamericana y, supuestamente, ha “autenticado” la CIA.
Los de la CIA
no pueden ser tan tontos como para creerse esto. Lo que sucede es que, en la era de las pantallas, a los
espíritus humildes y acríticos que moran en nuestro mundo les hace falta una
imagen para que se terminen de creer algunas cosas. Las imágenes, para nada
improvisadas, tienen la supuesta falta de calidad de la urgencia, pero esa falta es deliberada: así se ocultan mejor los fallos de interpretación. Yo afirmo que este
video no sólo no es el del supuesto ataque con armas químicas de Damasco, sino que además ha sido grabado en alguna escuela de arte dramático de
Estados Unidos.
Pero primero voy a reconocer mi total desconocimiento de
cómo actúan las armas químicas: sólo tengo como referencia los efectos de
espolvorear un insecticida de aerosol, y todos tenemos -en el oído sobre todo-
el ruidillo del aleteo de las moscas boca arriba y alas abajo, con sus
escandalosos movimientos circulares. En el video nos dan una ración de espasmos
mortuorios con el mismo movimiento que realizan al menos un par de actores, uno
de ellos con barba dispersa, como muy típica de joven musulmán.
Así todos los espíritus cándidos del mundo identificarán con
lo que conocemos como muerte química. Si lo hubieran sonorizado estoy seguro de
que haría brrrrrrrrrrrr.
Yo creo que si uno muere de esa manera se desencajará mucho
más de lo que hemos visto y reflejará esa tensión en los rostros, aparte de que estoy seguro de que también habrá muchos vómitos.
Making OFF o Cómo se pudo hacer si se hubiera hecho en Damasco.-
Si hubiera sido realidad: supongamos que aviones tiran
bombas en unos edificios de los suburbios de la capital siria y de ellos sale un extraño humo,
que seguramente huele mucho: creo que lo llaman gas pimienta o gas mostaza. Es
posible que alguna gente corra a refugiarse en los sótanos y empiecen a morir
fruto de una asfixia. Pero la mayoría, los que pueden, huyen a la calle, lo más
lejos posible, con un trapo o una ropa en la nariz, buscando aire puro.
Supongamos que estos muertos que nos han presentado se
quedaron en casa o estaban dormidos. ¿Cómo y para qué han sido llevados al local de filmación todos juntos?
¿Quienes, sin unas especiales mascarillas -no sé si los rebeldes las tienen a mano- se habrían atrevido a entrar mientras durara el olor dentro de unas casas, que
seguro que todavía estaban sin airear, para recoger cincuenta o setenta cadáveres
recientes?
Serán, la mayoría, amigos o familiares y buenos vecinos, y lo
harán para salvar vidas. Pero qué lógica tiene encontrar a al alguien vivo y no llevarlo a un médico o a un hospital, sino a una morgue para que haga
la mosca en el suelo y lo filmen. Ante una masacre, una tragedia como esta,
ningún vecino se juega la vida para rescatar otro y después es tan inhumano
como para llevarle a que se muera frente a las cámaras: no sé si su conciencia, pero la familia del muerto
no se lo perdonaría en la vida.
Yo no creo en estos
muertos filmados como tampoco creí en el, (inoportuno para Assad oportunísimo
para Obama) bombardeo, con estas armas especialmente viles. Hay que ser “mu
tonto” para dar un pretexto de esta categoría, además, sin ninguna necesidad, ya
que estaba ganando la guerra.
Pero daré el argumento definitivo para demostrar nuestra
incredulidad y, de paso, voy a aclarar por qué defiendo que necesariamente ha
sido grabado en Estados Unidos.
En el muestreo que hacen de los cadáveres, unos treinta o
cuarenta la mayoría jóvenes falta el principal
detalle de credibilidad: no se ve ninguna camiseta de Messi o de Neymar.
Eso es la prueba definitiva de que ha sido grabado en Estados Unidos donde el fútbol es, a diferencia del resto
del mundo un deporte minoritario, por lo que, al no verlas constantemente, no se han dado cuenta de lo representativo de este
detalle en la población, especialmente del tercer mundo.
Cualquiera que haya viajado lo sabe, y yo, que he mirado
muchas imágenes callejeras de las primaveras árabes, si no haced la prueba, siempre se ven entre los
participantes camisetas de equipos de fútbol europeos, y en esos tumultos de la
calle, no sólo estaba la casi siempre de Messi, también he visto camisetas de Iniesta, Xavi y
hasta de Sergio Ramos. A no ser que Siria sea una excepción igual a Estados Unidos, no es
posible hacer un muestreo de 40 jóvenes en el que no aparezca este elemento,
luego la grabación es falsa de toda falsedad.
***
Todo es un tosco pretexto para que Estados Unidos dé un empujón militar a los
rebeldes que, o bien cambie el régimen, o bien debilite y desactive mucho más a
Assad.
Fuera de lo que es el tablero de ajedrez de la dominación
internacional, me da la impresión de que Obama no quiere pasar a la historia
como “el negrito blandito”. Su falta de testosterona militar perjudicaría no
sólo a su sucesor en la candidatura
demócrata, sino a otro eventual “afroamericano” que pudiera postularse en el
futuro.
Lo terrible es que los estadounidenses, aun los demócratas,
parece que siempre van a preferir el modelo de
americano de John Wayne, con su dialéctica matona de los puños y las pistolas,
frente al no menos norteamericano Jack Lemmon, dubitativo inteligente y humano, que
preferiríamos otros.
Y ahora ya, completamente en serio, quiero convocar a los
convocantes de manifestaciones para que empiecen ya la tarea, porque si la CIA el Pentágono y los otros
centros de poder y manipulación, se han molestado en hacer esta pantomima es
que tienen muy decidido eso de tirar las bombas.
¡NO A LA GUERRA !
PD. Luego dirán, -cuando se
descubra inequívocamente la farsa- que todo el mundo vio claro que habían
gaseado a su gente y que comprendimos que era un justo bombardeo. Como la invasión de Irak.
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