viernes, 29 de abril de 2022

Cívica.

Este extraño paraje nos salió al pie de la carretera. Se trata de unas cuevas o pasadizos excavados en esta piedra áspera que un día debieron ser un pequeño atractivo turístico. Hoy están clausuradas, supongo que porque no reunen las medidas de seguridas admisibles en el siglo XXI. No se permite el paso, pero sí es obligatorio para nosotros curiosear y retratar. La incívica actitud de otros curiosos dejó entreabierta una puerta por donde yo me colé como en la fiesta de Mecano a curiosear un poco más.




A veces me digo si el niño intrépido que me guía recibira alguna dura lección a los 57 años
Porque altura había suficiente para romperme más que una pierna, a poca trampa que hubiera



Ahí, a la izquierda de la puerta se vislumbra una señal de "prohibido el paso", pero yo ya estaba de vuelta, habiendo levantado impunemente, para mí y para vosotros, las faldas del misterio.


Al lado del merendero rupestre de Cívica tenemos esta pintoresca cascada, que supongo que no funcionará en verano, así que damos gracias por la visión primaveral y nosotros, que pudimos escucharlo, ese ruidillo tan agradable para los que, como yo, nacieron en secano.


 
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario