jueves, 18 de noviembre de 2021

Leo Brouwer, un puntal que se retira

 La mayoría de la gente no conoce este nombre, pero todos los guitarristas clásicos sabemos que este cubano es el compositor más importante de los últimos 60 años para nuestro instrumento. Esto es mucha gente en todo el mundo, aunque él compone para muchos instrumentos y también para orquestas; ya que, entre otras muchas cosas, también es director de orquesta.

Ahora mismo pienso que merecería que le invitaran a dirigir el concierto de año nuevo en Viena, aunque eso debe depender de las grandes discográficas, y quizá fuera visto como una compra, y a este octogenario genio de la música no le hace falta venderse como le ha pasado a un tal Yunior García, que era la cabeza visible de esta protesta del pasado lunes. ¡Qué fácil es descabezar una cabeza, por cierto! 

En el blog de Silvio Rodríguez, aún no ha aparecido una referencia al importante video del maestro que se interpreta a sí mismo como un filósofo griego buscando al hombre con un candil y llamando a su isla El país del NO"; se entretienen en zurrar a este episódico Yunior, soslayando las verdades de este Senior que son las que duelen.

Previendo los malos entendidos al final de ese video aparece una carta manuscrita y firmada por el músico. (No es él, lo imitaron, es una manipulación... Sabe con quién se la juega)

Yo tengo la suerte de tener una carta manuscrita de este gentilhombre, que se dignó contestarme otra que le dirigí en los años 90. Precisamente mi única conversación frente a frente con Silvio, que fue en Salamanca en el año 89, versó sobre Leo Brouwer, y también mis últimas intervenciones en el Blog de Silvio, que se llama Segunda Cita, han sido relativas a este gran humanista.

dura poco más de un minuto

https://www.youtube.com/watch?v=Fy29-iKgOk0

1 comentario:

  1. Silvio Rodríguez me ha publicado íntegramente este artículo en su blog "Segunda Cita" hoy 18 de noviembre. Le honra y se lo agradezco. Además me ha contestado personalmente, dirigiéndose a mí en su blog. Dice que sí se publicó y le creo, con lo cual rectifico, debió pasarme inadvertido pues no hubo ningún eco.

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