Sierra de Béjar-Candelario (II)

 El calor de hoy aplana tanto las ideas de salir a hacer algo que cumplo el compromiso de mostrar más fotos de aquel día. Hoy sería suicida andar por estos lugares, en mi modesta opinión.

Una pequeña charca, antes de llegar. Tiene uno tantas ganas de agua fresca...

una vaca con su ternero, el trabajo de los ganaderos aquí es concentradamente duro, (aparte de los saneamientos y crotales identificadores) buscar y llevar hasta el lugar donde esté el camión que ha de llevarse estos pedazos de proteína criada a base de pastos, (cualquiera se trae un saco de pienso tradicional, o de soja transgénica, hasta estas alturas)

Hoy, que hace tanto, pienso en lo que reflejarán el calor estas piedras ahora mismo.

Antes de ver agua, esta escarpadura dominante.

vacas que se quedaban fijas en mí. (No había nadie humano más en este paraje aquel día.)

                            las charcas o lagunas están vírgenes y esta cualidad es un placer para mi vista

 

Vegetación acuática, ríete tú de los nenúfares de Monet, que vi en la Orangeríe de las Tullerías de París

                                    Cómo no hacer fotos, aunque sean parecidas

¡Qué ganas de bañarse hoy!, aunque está prohibido, cualquier otro día uno se helará en estas aguas.

Quise fotografiar el perfil del toro de Osborne, pero se me giró en el último momento.

esta es otra laguna que hay más abajo, ya seguiré esta narrativa visual en otro capítulo.