En un palacio de ladrillo al lado de la catedral más enladrillada está el museo sobre este pintor. Uno a veces se pregunta por qué tanto nombre, si será por la película de John Huston, porque era un aristócrata enano y putero, pero no, es que es uno de los grandes genios de la pintura y mirándole fijamente se da uno cuenta de que cuando el río suena es que lleva agua, (aunque la verdad es que el Ródano que veremos en Lyon, que lleva muchísima agua, suena poco, menos que el río Cuerpo de Hombre que al ser de montaña es muy escandaloso en sus crecidas).
Me pasó al ver de cerca los Van Gogh del museo d'Orsay, comprendí en directo la fuerza de su arte. Allí, que había tanto de tantos y de Toulouse Lautrec también, no descubrí a este pintor tan bien como ahora en su museo.
En los museos franceses te dejan arrimarte lo que quieras al cuadro y fotografiarlo -sin flash-, pero a cambio te los ponen con un cristal de por medio. Quise reflejaros su pincelada genial pero se me cuelan los brillos vidriosos.
Otra cosa que se descubre es que a pesar de ser un aristócrata rico era, como todos los genios, un gran trabajador. Hay mucha obra, desde bien joven.
Disculpad la mala calidad y los brillos, pero os dejo esta imagen para que se vea todo el movimiento que es capaz de mostrarnos un genio con unos pocos trazos
Tienes que repasar las diferencias entre "también" y "tan bien".
ResponderEliminarQueda un poco fea la confusión en un escritor.