miércoles, 27 de julio de 2016

Europa.

No sé si en los próximos años se seguirán realizando campeonatos de selecciones de fútbol en Europa. Francia ha pagado la última organización con vandalismo y destinando recursos de seguridad, tan perentorios, al asunto de vigilar las manadas de pendencieros que les llegaron. Y Francia, que es un país rico y bien organizado, estaba desbordada.
Pero es Europa la que está desbordada por el terrorismo islámico. Pronto nos tocará otra vez en España, porque seguro que hay musulmanes radicales, radicados en "al Andalus" dispuestos a no ser menos ni  dejar solos a sus "hermanos" inmolados en los otros países.

Por cierto... No sé cómo la policía francesa tuvo que abatir a los dos musulmanes que, armados solo con cuchillos salieron de una iglesia donde acababan de cometer la "heroicidad" de degollar a un anciano de 84 años, (el cura de la iglesia) para grabarlo y escarnecer a los cristianos, o excitar a su "tropa". La cuestión que planteo es que si solo tenían machetes o espadas, ¿no hubiera sido factible rodearlos y desarmarlos, con palos, porras, escudos... o  dispararles a las piernas etc?
¿O ya nos estamos embruteciendo como ellos?

Supongo que a Europa se le acaban los miramientos a la hora de detener, a la vez que la solidaridad con el mundo musulmán que huye. Una cosa es mantenerlos y albergarlos y otra consentir que vengan a matarnos con toda esa saña de que son capaces.
Cuanta más solidaridad prestemos a la pobre gente, más votos a la extrema derecha. Hoy mucho más. Aquí si que se cumple una reacción en cadena.
Ahora está "caliente" la máquina; con esta excitación, cualquiera que quiera inmolarse "por" el estado islámico tiene un hueco en las portadas de los  informativos. Y gente de esa, sobra. Incluso pueden salir imitadores de esas locuras en otras parcelas ideológicas.

Creo que a la ETA se la derrotó no solo porque aparecieron estos terroristas de verdad que buscan matar indiscriminadamente y, preferiblemente, morir en el intento, sino porque necesitaban muchos medios para garantizarse el alojamiento la huida, información para seleccionar objetivos y no fallar, incluso tenían un sueldo. Necesitaban comunicarse por medios modernos y controlar. Eso estaba en nuestras manos, (o en las de Estados Unidos)
Pero con esta otra gente basta la mera voluntad y un camión para matar 84 personas, (pero con un coche también se pueden matar a diez o doce en cualquier paso de peatones un poco concurrido. Y lo puede hacer cualquiera en cualquier momento ¿Cuántos musulmanes están conduciendo ahora mismo en Europa?) Y no necesitan nada más.
Si esta locura dura un año seguido veremos partidos que propugnarán la caza indiscriminada del musulmán y caravanas de deportados a algún estado que los admita, Siria, o algún otro paupérrimo de África.
No sé si los europeos somos capaces de soportar un año seguido de terror como estas últimas semanas, pero estoy seguro de que "ellos" sí. Estamos en guerra.
De momento seguiremos siendo europeos, defensores de los derechos humanos, solo nos queda la estadística para no encontrar la muerte; no nos va a tocar precisamente a nosotros. Pero a medida que se nos aproxime el terror, o se generalice, nos iremos desmoralizando.
Veremos que solo es cuestión de cuánto nos acerquen la sangre y contemplaremos como nuestros principios se oscurecen como una gota de café que cayera sobre un azucarillo.
Por cierto, la planta del café proviene de Arabia.

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