Creo que en las elecciones ha pasado lo mejor que podía pasar: mayoría absoluta para el Partido Popular. Nos esperan grandes recortes; la cosa social nunca volverá a ser como era y es mejor que quien tenga que ejecutarlos, lo haga sin traicionar a su ideología y a sus votantes.
Sólo lamento el castigo tan severo que han sufrido Zapatero y Rubalcaba. Mi alma se suele ir con los perdedores. Espero que en su fuero interno sepan descargarse del pensamiento el mal sabor de boca de esta purga: Zapatero diciéndose que quizá con él no se hubiera hundido tanto la nave, y Rubalcaba diciéndose que verdaderamente era una misión imposible nadar hacia el quimérico futuro, guardando la ropa del pasado presente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario