lunes, 31 de marzo de 2025

Markéting telefónico

 Una amiga me comunicó por el correo de Facebook y me invitó a comentar más por teléfono. Escribió su nuevo número, por si no lo tenía.

-De acuerdo. Ahora mismo te llamo.

-Sí, llámame pronto, porque como se acerque la hora de comer ya no cojo ningún teléfono que sea anónimo. Esos pesados...


El marketing telefónico está acabando con la función de comunicación de esos aparatos. El siglo pasado cuando sonaba el timbre de un teléfono en una casa todo el mundo iba corriendo a descolgarlo, ¿de parte de quién? y apremiaban al destinatario:

-Date prisa, que es conferencia.

A veces te llamaban desde una cabina, se acababan los cinco duros y se cortaba. Era otra manera de comunicarse más angustiosa. Hoy no hay quien corte una conversación por dinero.


Aunque el gobierno de España hace poco más de un año dijo que había aprobado una normativa que iba a acabar con estas molestias comerciales y los primeros días pareció que amainaba y quizá iba a cesar, pero actualmente redobla, es una locura. Tanta que yo corto, mucha gente corta; y a veces, cuando no cortas, dentro de los treinta segundos siguientes te arrepientes de haber hecho caso. Después de pulsar el rechazo con violencia te dices:

-La última vez que lo cojo de esta manera.


De manera que si ahora llamas a alguien que sospechas que no te tiene en su lista de contactos y te descuelga, te identificas inmediatamente suplicando que no te cuelgue. Luego le dices que te meta en su nómina de contactos, por si haces un día otra llamada.

Es lo que pasa con las nuevas tecnologías, con las tarifas planas, y los etcéteras: que han cambiado nuestra manera de vivir. Últimamente nunca abro al telefonillo a nadie más que al cartero o al que viene a leer el contador del agua de la Comunidad. En cuanto me empiezan con un rollo de venimos a ofrecer a los vecinos... corto secamente diciendo:

-¡A mí no! ¡Yo no le abro!

Juro que yo antes no era así.

  

sábado, 29 de marzo de 2025

Peñaroya minera (Córdoba)

Lugares mineros que de niños nos hacían aprender: Almadén( Ciudad Real) Linares y la Carolina en Jaén Zinc en Reocín (Santander) Riotinto, Peñarroya...

En Peñarroya extraían carbón y por no moverlo lo quemaban aquí para fundir metales, a lo mejor el plomo y la plata de Azuaga
No pasó ningún tren por aquí el tiempo que estuvimos. Los raíles no tienen señal de rozamiento reciente

y tampoco la estación ni los andenes.
Las ruinas posindustriales son feas, de una estética violenta, que pueden servir de realce para una pose de modelos adolescentes, pero por contraste. A mi hija le gustaba colarse en las de Béjar para hacer fotos a sus amigas.

Unas ovejas comen hierba de óxido férrico, o ferroso. Hace 45 años que elegí letras y dejé atrás la química del bachillerato, pero sé ver que hay mucho óxido por aquí.


Viejos modelos de coches, y neumáticos que un día arderán y no será por azar, sino porque dejen de estorbar y afear.


viernes, 28 de marzo de 2025

La fascinación por los bandoleros.

 Leo en las Crónicas Italianas de Stendhal un elogio de la bandolería andante, como manera del oprimido pueblo llano de defenderse de la corrupción de las opulentas familias de los estados italianos, de sus esbirros brutales, de sus jueces comprados...

en ninguna parte es tan notorio el precio de la mentira y ninguna fue ésta mejor pagada que en la Italia de la época que comentamos

Y me entra el arrebato sociológico de lanzarme a escribir. No sé en qué medida pueda seguir vigente esta vieja fascinación bandoleril en la Europa donde vivo, pero no tiene ningún sentido lógico, económico. Se trata de un delirio juvenil, sigue siéndolo, la curiosidad por los niños malos, por los mozos malotes que prefieren y declaran muchas chicas que no miran ni de reojo esa realidad de maltratos y feminicidios. La sociedad actual está llena de gente que quiere parecer aguerrida como un pirata festoneado de tatuajes y pendientes, que aparentan su virilidad por la estética, (dicen que se sufre cuando a uno lo tatúan- claro, ya sería mucho más caro si hubiera un médico anestesista de por medio) o por la indumentaria.

El tonto millonario de Maradona se tatuó al Che Guevara en un hombro, mientras con el otro brazo contrataba asesores fiscales que le buscaran cómo pagar menos a hacienda.

Los piratas: canciones de Espronceda, de Serrat, de Sabina... que yo me sepa. ¿Alguien querría encontrarse un desembarco pirata de verdad cuando está en la playa? Sí para hacerse un selfi, pero no para que le secuestraran y pidieran un rescate. El Mediterráneo está lleno de fortalezas y de torres vigía para avisar de la llegada de estos rapiñadores.

Los viejos bandoleros de los países del sur: los italianos, los andaluces, hasta hay un bandolero de los montes catalanes al que Don Quijote respeta... fueron o siguen siendo el sueño inodoro de las burguesas lectoras o de las niñatas actuales. Y encarnarlos de alguna manera, para hacerse atractivos, el de muchos alucinados por ello. (Con lo opulentos que son los hijos casi únicos de ahora).

Tras la guerra civil española algunos perdedores se reorganizaron en el maquis, los guerrilleros, para seguir dando guerra. Uno de Santa Cruz del Valle (Ávila) fue capturado pegando tiros en las montañas de Asturias después de la rendición y fusilado en el 40.  Pero en la comarca abulense de Gredos hubo varios secuestros, en Santa Cruz del Valle y en Cuevas recogí testimonios. La Guardia Civil los llamaba oficialmente bandoleros.

A un colaborador de Santa Cruz que tengo grabado le multaron en gordo, por haber vendido un cordero a los maquis. Pero otra gente del mismo pueblo dijo de ese hombre los vendía más caros de lo que valían, aunque él me confesó que estaba entre la espada y la pared: primero que si no se lo vendía se lo quitaban, y si se los vendía tampoco sabía a quien lo hacía. Así debió sucederle, porque, inmediatamente la Guardia Civil organizó las "contrapartidas". Se quitaron sus uniformes se dejaron barba, trasvistiéndose de bandoleros, y se presentaban ante los serranos como maquis que venían a pedir o comprar ayuda. Así en cuanto cazaron a unos cuantos "colaboracionistas" a pocos les quedaron ganas de seguir ayudando aunque fuera por dinero a estos perdedores recalcitrantes.

Lo habré escrito por aquí, además los guerrilleros rapiñaban a los más pobres, a los que cultivaban en un mísero bancal serrano y no a los de las ricas vegas; los que tenían un par de cabras o cualquier apero en una choza. Pobres idealistas contra pobres de solemnidad aburridos, todos igualmente derrotados que solo buscaban salir adelante en la posguerra.

Hoy un nuevo bandolerismo estético campa, entre niños que tuvieron siempre habitación propia y "sus" cosas. Yo compartí habitación con mi hermano hasta que se fue de casa, quizá en la adolescencia tuvimos cada uno un cajón de la mesilla para nuestros tesorillos. Forma de bandolerismo son las criptomonedas, ese timo piramidal de un anarquismo en nombre de no se sabe qué, pero para listos, listos los que las crean y listillos los que pican en ellas y cuentan lo bien que les va.

                                                    ***

Realmente la escuela de vida, la mía por lo menos, es la agricultura. Uno extrae semillas de los tomates del año anterior y con ellas siembra un semillero, en un lugar resguardado de las heladas. Si han nacido bien trasplanta las plantitas a su definitivo surco, lo riega, lo pone al lado un tutor, (que en esta parte de Salamanca se llama támbara)  ata las ramas para que no se quiebren por el peso de los frutos, y los recoge. Eso es la verdad de la vida pacífica y fructífera; Beatus Ille. Para mí carece de sentido fascinarse por alguien que me viniera a robar los tomates.

Plomo y plata.

 A raíz de la película y alguna serie de televisión sobre el narcotraficante colombiano Pablo Escobar se ha popularizado la frase suya de plata... o plomo. Que venía a ser, "o aceptas que te compre y ya eres de los míos, o te mato".

Buscando información en Wikipedia sobre Azuaga me encuentro que durante el segundo tercio del siglo XX este lugar fue el mayor productor ¿mundial? de plomo. Me parece una exageración que así fuera y que yo no me hubiera enterado de ello hasta ahora. Lo que sucede en esa enciclopedia que compone la gente, es que hay mucha gana de notoriedad y de alabanza, y como mentir o exagerar es gratis, pues los de ese pueblo ahí nos lo dejan.

Ojalá haya sido cierto y yo esté equivocado, pero tiene que haber mucho plomo en el mundo, las balas son de plomo y en todos los países se gastan, balas y perdigones, así como las antiguas baterías, y también las antiguas cañerías. Mucho plomo por el mundo y muy importante quien lo produjera.

También, entre el plomo, en Azuaga se extraía plata.









Curiosa portada vegetal sin apóstoles ni infiernos, como muy musulmana.

Un sagrado corazón de Jesús tan de moda hace cien años
Dominando el paisaje desde el castillo.
Una torre recalcitrante





volviendo al pueblo otra vez la iglesia parroquial tan vegetal.


jueves, 27 de marzo de 2025

Azuaga

 

No sé si este edificio era el teatro, pero nos recordó que el hermano del presidente del gobierno, debería haber venido hasta aquí a promocionar la ópera, que supuestamente era su trabajo. Me hubiera debido molestar, (y arriesgar) en preguntar si efectivamente vino alguna vez a Azuaga. Ya diera en mi inquisitiva con un socialista o con uno que no lo fuera, se podrían molestar: los socialistas, porque es una acusación directa a su corrupción, y los que no lo son, porque es una evidencia que a los de esta provincia "se la colaron doblada" por varios años

                                     ¿y qué culpa tiene esta belleza tan aseada?

Altar de la iglesia aseada, que también viene después. Parece que no sufrió desmanes de la guerra civil, como muchos templos que veremos en este viaje. El ventilador eléctrico será muy necesario, de estar ahí, a la derecha. Supongo que algún día las iglesias tendrán que poner aire acondicionado para atraer feligreses.


Iglesia recientemente encalada. Los del Sur tienen fama de poco trabajadores, pero no es poca tarea mantener y  encalar todos los edificios, públicos y privados, todos los años. Esto ofrece una sensación de aseo ordinario que como viajero me complace, me da la bienvenida.


                                    Azuaga está en un alto
La portada de la iglesia que vimos ayer
Y su ábside, festoneado de coches que mi anterior foto evitó.
Disposición romana de los dinteles de este edificio de ladrillo.


Nunca, en ningún sitio, había visto propaganda para reclamar que se escolarice a los niños en la educación pública. Debe ser porque muchos padres en este pueblo eligen la religiosa, entonces un sindicato de profesores pelea publicitariamente, gastándose dineros, para que esto no suceda. Detrás está una prueba de que la primavera llega antes de marzo al sur de Extremadura.

miércoles, 26 de marzo de 2025

Badajoz, la provincia más grande de España

 No sé ahora. Antes era la más pobre. En algún sitio leí que en las tallas que se hacían para el servicio militar los mozos de Badajoz resultaban los más bajitos, (los más altos, los de Huesca). Luego está la historia del atraso, de las dehesas, la película y el libro de Los Santos Inocentes. La provincia aparece esquinada y sin mar, la capital al lado de Portugal, todavía más pobre y marginal.

Ahí colocaron al hermano de Pedro Sánchez, de coordinador de conservatorios, con un sueldazo. Seguramente lo hicieron porque esa provincia está como escondida y parece que pueda ser menos exigente y más corrupta, poco cívica, donde nadie se queja: que tragan lo que sea. Estoy convencido de que la jugada de los Sánchez Pérez-Castejón les ha dolido mucho a los pacenses, que es el gentilicio de Badajoz que era Pax Augusta: siempre lo peor para nosotros.

Pero yo ahora pienso por recientes experiencias que no hay provincia más bella ni con más lugares que visitar en España. Puede que me equivoque, sucede cuando pongo el foco afectivo de mi alma en algo, ya sea un libro, una música, una comida o un paisaje; parece que no hay más.

Enumeraré: Mérida es la ciudad romana más importante de la península,  su teatro el mejor conservado quizá de todo el mundo, también tiene vestigios árabes y, por supuesto, cristianos. Almendralejo tampoco está mal, aunque tardamos en verla. Pero Olivenza es un pueblo delicioso, que les conquistamos a los portugueses, con sus casas blanquérrimas. Jerez de los Caballeros es una población espectacular por torres e iglesias, y soberbio castillo. Medellín tiene castillo y teatro romano, allí nació Hernán Cortés. En Alburquerque hay otro espectacular castillo roquero y nació Luis Landero. Fregenal de la Sierra fue uno de los grandes descubrimientos del año 24. También Zafra, la ganadera...

Aún no hemos visto Monesterio, ni Regina, ni Alange; sobre todo nos falta la Zalamea del alcalde de Calderón de la Barca.

Hace tiempo que no entramos en Llerena y siempre su torre nos llama a volver a visitar su plaza, pero al comienzo tenemos prisa por ir, porque vamos a muchos sitios; o por volver, porque venimos de muchos sitios y estamos cansados. Nosotros bajamos por la Ruta de la Plata hasta el desvío de la N-432 que nos lleva hacia Córdoba Jaén Granada, Almería, Murcia...

Pues en esa carretera hace poco, en el último viaje hasta la fecha, encontramos otro pueblo. De un nombre tan hermoso como Azuaga.


                                               El cementerio y las flores.
                                                        Típica calle del sur de España

                       Ábside fortificado de una de las iglesias principales


                                                          Iglesia que está adosada al Ayuntamiento

Tiene restos de un castillo además, por salirnos de las paredes encaladas.


martes, 25 de marzo de 2025

Alemanes de mugre y no de charol

En las películas de la segunda guerra mundial suelen aparecer los alemanes con una severa, exquisita y rutilante uniformidad. Luego caen como moscas nada más salga un americano con una metralleta. No son humanos, son como los soldados imperiales de la guerra de las galaxias aunque con el casco de Dark Vader. Ahora me doy cuenta de que está inspirado en aquellos. No en los soldados reales sino en su interpretación jolivudiense.

Pero los alemanes son un pueblo muy culto: el que ha producido los mejores músicos de la historia, y si les agregamos a los austriacos tienen la mitad de la mejor música que se haya escrito, (tirando por lo bajo).


 Cuando era bibliotecario durante mi bachillerato tenía detrás de mí el libro "Opiniones de un Payaso" de Henirich Böll y alguien me dijo que era bueno. No tuve tiempo de leerlo, y tampoco sé muy bien qué hacía allí, pues en el BUP no dábamos literatura universal, solo española. Más tarde lo compré y lo he leído, y creo que me gustó, además lo hice con la cara de un amigo muy descolocado que tenía por entonces.

Hace mucho; después dejé de leer la Montaña Mágica porque me parece muy inferior a Los Buddembrock, de Thomas Mann. También he leído cosas de Günter Grass, que me han decepcionado. Y otros libros alemanes de Anagrama que no me han interesado nada.

Encontré este libro en el REMAR de Ávila. Ya había cogido esa mañana demasiados, y me dije, "pero si no lo vas a leer". Tengo demasiados libros que no voy a leer así que lo dejé, pero después en casa me dije, y total ¿por un euro?... si todavía tengo sitio. 

Al mes siguiente volví y aunque tardé en encontrarlo me felicité porque nadie se lo hubiera llevado. Ahora me felicito mucho más. A lo tonto lo abrí y me gustó el primer cuento. Y me gustaron todos los demás. Están llenos de sensibilidad y de guerra vivida por un soldado, de penurias y barro, de miedo y de tragedias, de recuerdos de la guerra y de la paz dentro de la guerra. Historias muy humanas y no de robots. Los alemanes de a pie fueron obligados, y engañados a la segunda guerra mundial. Allí tragando sangre, hambre y polvo, y frío y metralla y hielo; con mucho miedo se perdieron millones de vidas todas muy valiosas. En el siglo XX ni en el XXI los alemanes no han conseguido reeditar a Mendelssohn ni a Brahms, ni a Haendel; ni a Bach ni a Beethoven que son absolutamente irrepetibles, Ni a Schumann ni a Bruckner ni a Wagner, ni a Buxtehude ni a Weiss; seguro que los que hubieran podido serlo murieron en esa estúpida carnicería suicida. Y la humanidad debe lamentarlo como lamenta a todos los demás muertos.

Os invito otra vez al cementerio alemán que tanto me impresionó en 2019

https://guerracivilenlas5villasdeavila.blogspot.com/2019/09/francia-la-segunda-guerra-mundial.html

y a leer este libro, claro.

lunes, 24 de marzo de 2025

Ayllón 32 años después me dio una lección a mí

Al lugar donde has sido feliz no debieras tratar de volver, canta Sabina en su mejor canción.

He vuelto a Ayllón varias veces, la penúltima la paseamos completamente con mi hija. Yo iba con mucho miedo de encontrarme con exalumnos que me reconocieran y me pidieran cuentas de lo mal profesor que fui. Iba como un famoso sin gafas de sol, apretando el paso.

Pero aquí me afiliaron a la Seguridad Social, aquí me hice mi primera cartilla de banco, en Caja Segovia. Fui libre y poderoso económicamente, mi novia vino a verme al piso abiertamente y juntos hicimos nuestros primeros viajes en coche, la mayoría a la maravillosa provincia soriana. Nada pudo ser más bonito y feliz y creo que yo hubiera querido serlo siempre, pero no me dio tiempo a cansarme de ser profesor. Lo tengo guardado en un cofre de sueño. Conservo una fotocopia con las fotos de carnet de mis alumnos y también los tengo fotografiados en una excursión que hicimos a Burgos. Me da mucha ternura mirarlos. Tendrán ahora en torno a cincuenta años.

Ayllón es un pueblo amurallado que tenía dos cabinas públicas de teléfono en el año 92. Cuando no funcionaba la más cercana entraba por esta puerta en el recinto amurallado y cruzaba la plaza donde Fernando Fernán Gómez rodó parte de "El viaje a ninguna parte" que sería por el 87, o así. Yo no vi la película hasta que la pasaron por televisión, varios años después de haberme ido de aquí.

El arco de entrada
El palacio de los Contreras, donde nunca  conseguí entrar



La plaza, donde entonces había pocos o ningún coche.
Quise entrar en un bar que conocía, donde, por cierto, perdí al mus, (y mis contrincantes pudieron presumir de haber ganado al campeón de derecho de Salamanca del año 88) y también tomé algunos vinos con los compañeros, pero ya no existe. Entramos en otro aquí en la plaza que es completamente nuevo o está muy renovado a tomar unos cafés con leche. Nunca consumí nada en él si es que entonces era bar. 
Lo atiende un matrimonio suramericano, serían las cuatro de la tarde.
Miré alrededor y había pocos clientes; algún sudamericano también. La España vacía la mantienen en gran parte los extranjeros. Nosotros habíamos comido frío -fiambres o latas- unos pocos kilómetros atrás, al aire, mirando el paisaje soriano,  la dueña nos dijo: ¿quieren estos pinchos de la bandeja que estoy limpiando? se los regalo.
-Pues sí, gracias.
Eran tres o cuatro pinchos de pimientos verdes asados, y quizá pescado o tortilla, un revoltillo, el caso es que, aunque estaban enfriándose, supieron buenos. Yo nunca tiro la comida.
La lección fue cuando pedí la cuenta dos cafés con leche: dos ochenta. Yo saqué un billete de cinco, y ella me dio la vuelta, y recogí la propina del platillo. Hubiera querido dejar un euro, pero me dio una moneda de dos, dejar veinte céntimos me parecía demasiado poco. Antes de llegar a la puerta me sentí mezquino, tacaño, insensible. No sé qué pensaría la mujer. Le he dado a este hombre por valor de cinco y no es capaz de dejarme las dos veinte que le sobraban.
Me hubiera debido volver, pero habría sido ridículo. 
La lección es que el disgusto me duró bastantes minutos según conducía. Había entrado también por devolver algo de lo mucho que me dieron en Ayllón, y van ahora y me regalan, y no me doy cuenta de lo que en justicia debí hacer.
Prometí a mi mujer, que en el siguiente viaje volveríamos a tomar algo en ese bar y dejaría la propina que innoblemente está quemándome el bolsillo. Ahora os lo prometo a vosotros también.
La vida enseña, pero los viajes enseñan al cuadrado, porque la vida se  revela más  intensa y seguida. 

 

domingo, 23 de marzo de 2025

Después de Coillure y Soria me viene Machado

 lo nuestro es pasar, pasar haciendo caminos, caminos sobre la mar

No es posible hacer caminos sobre la mar. Sí, se dragan puertos; sí, se hacen cartas marinas que indican la profundidad del lecho para que los barcos de gran calado no encallen. Pero sobre la mar no pueden hacerse caminos, como mucho se pueden poner boyas, pero eso no son caminos, tan solo son señales.

No hay camino, lo nuestro es pasar. La ley de la vida es la muerte; el no ser, el acabose. Somos una chispa, una pila en una linterna; pero solo una única pila, otra pila podrá lanzar parecida luz pero será otra vida, otra vida finita.

La ley más poderosa y más clara es la muerte, no hay otra; lo peor que que también vamos muriendo en vida, mermando en facultades, incluso en la facultad de ilusionarnos, que era una manera de estirar la vida. Envejecer es desengañarse de la ilusión, la comprobación de que ha muerto considerablemente en nuestra vida, y el barrunto que ahí vamos.

No conozco a muchos que me leen, no sé si alguien me leerá en un futuro, no sé si la empresa que me permite escribir aquí seguirá toda la vida de dios. Seguro que no. Además sois y seréis mortales, sometidos a la ley de la muerte. Yo pasé por aquí como un sueño, llegué a creerme que mi vida sería futuro, aunque desde chico supiera de la muerte lejana. 

Sí, no es operativo estar pensando toda la vida en la muerte, porque la vida es pensar en la vida, como hacen los animales. Pero a veces a mí me pica y me rasco reflexionando.

Muero al reflexionar sobre la muerte, esa pesada vieja que se agranda en el horizonte. Me gusta cruzar horizontes con alegría, pero lo que hago, sin darme tanta cuenta, es dejar otros horizontes atrás. No tenemos la capacidad de mirar hacia atrás girando un ojo como hacen los camaleones. Tenemos que darnos la vuelta: falta mucha gente que hizo caminos en la mar y parte de nuestra vida se quedó en ellos que fueron testigos. Ahora no hay quien de testimonio de muchas cosas que fuimos. Pero la vida es mirar hacia adelante, no convertirse en estatua de sal. Mirar adelante sin sabiduría, tan solo con esperanza, que es una forma poética de sobrevivir, aunque sea con inconsciencia. 

El viaje no acaba en Coillure. Siempre quedará Soria.

sábado, 22 de marzo de 2025

Campos de Castilla.

Me enamoré de Soria, de la provincia soriana la primera vez que la vi. Y fue aproximadamente en este lugar. 

En el año 91 me tocó la suerte de trabajar en Ayllón, el último pueblo segoviano del noreste, lindero además, con la provincia de Soria. Conduciendo mi primer Renault 18 la primavera siguiente una tarde atravesé la linea provincial que saldrá en la última foto de hoy y me encontré estos campos. No sé qué tienen pero aún me transmiten un estremecimiento que no hacen otros, que los hay muy bonitos en muchos lugares. Me gustan todos, pero éstos son como más como primer amor. 

Nunca los fotografié, entonces las fotos costaban dinero, y eran tan sin objeto, que no...; incluso ahora puede que no se entienda, y yo tampoco quiero esforzarme en buscar palabras; creo que no me saldrían. 















                                 ralos girasoles, nacidos en pedregales, criando malvas








Me gustó tener tiempo esta vez, para emborracharme de tierra.


la última vez que vi tierra soriana. Ahora iremos otra vez a Ayllón, que al comienzo de este viaje no hubo tiempo.