Esto solo se puede explicar por vídeo.
está en Cahors, de donde ya nos vamos a ir. Es una atracción que nos encontramos sin buscarla, aunque está publicitada en los mapas turísticos de la ciudad, pero todavía no habíamos pasado por la oficina de turismo. Cuando me encuentro algo de este cariz me acuerdo de que hace unos cuantos años llevaba a una niña conmigo y a través de sus ojos yo disfrutaba cualitativamente más. No es que el niño de sesenta años que llevo dentro no sea curioso, ni carezca de capacidad para admirar, pero echa mucho de menos a aquella niña.
En España cuando se quiere alabar el nivel intelectual de un lugar se dice allí el más tonto hace relojes. No son muy famosos como relojeros los franceses, y sí sus primos suizos, pero este artefacto al lado del río Lot da un nivel de competencia en este ramo sublime.
Lo más lógico teniendo el río Lot al lado habría sido hacer un reloj de agua que sé por los crucigramas que se llama clepsidra, aunque no soy consciente de haber visto ninguna en ningún sitio.
Acabo de volver a ver el video y salgo reflejado en el espejo.
Como a casi todo el mundo, me resulta un poco estúpida mi voz grabada.
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