sábado, 30 de marzo de 2024

Elogio del acumulador de libros

 Sabréis que soy un avariento acumulador de libros a un euro. Una de las dedicaciones más placenteras de mis últimos 20 años, ha sido visitar rastrillos, y lugares de segunda mano donde se vendían libros a este precio (y a menores, por supuesto).

Indudablemente es un abuso de estanterías; aparte de las que he comprado, he construido bastantes metros cuadrados de ellas. Afortunadamente pudimos adquirir el piso de al lado y todavía no hemos llenado esta segunda casa, aunque siento el agobio de que nunca podré leer todo lo que he comprado, pero me gusta tenerlos ahí con sus lomos mirándome cada vez que paso, guiñándome un ojo, retándome. Y gozo siendo su propietario, puedo subrayarlos y también prestarlos, y hasta olvidarme de que están prestados, porque son míos, ¡qué poderoso soy!

Recientemente de un establecimiento de segunda mano de Salamanca nos trajimos doce libros más. Recogimos Una cierta Justicia  de PD James. Una autora británica de libros policíacos que mi mujer aprecia. Cuando estábamos rebuscando se lo mostré yo, y me dijo que sí, pero al volver a casa y ir a colocarlo en la estantería de novela negra me di cuenta de que lo teníamos, y además en la misma edición. Es algo que suele suceder sobre todo si lo tenemos en distinta, la culpa es de acumular y no haberlos leído, pero tampoco descarto del todo que algún día me compre alguno que hayamos leído.

Como está repetido intentaré ir venderlos con otros veinticinco o treinta en un mercadillo de primeros de mes en la Plaza Mayor, o el día 23 de abril, que hacen otro alrededor del Casino Obrero de Béjar. Por eso mismo me dije "voy a leérmelo no sea que algún conocido me pregunte y me pille que vendo libros sin haberlos leído".



Estoy maravillado. ¡Qué buena construcción de la trama, qué estupenda penetración de los personajes, que buen anzuelo lanzó a mi garganta desde la primera página! (llevo más de cien de casi seiscientas que tendrá) Me paro y respiro de placer diciéndome: ¡Qué buena! ¡Cómo pude no haberla descubierto antes!

Por supuesto que ya la he guikipediao ¡que eso siempre está lleno de elogios! y me ha hecho volverme a felicitar por tenerla en las manos.

En un momento de euforia decidí levantarme e ir a la parte de la casa donde tenemos la novela negra. Y gran sorpresa y recompensa a mi avaricia, resulta que tenemos seis novelas de esta señora, y la repetida suma siete. Se leen muy bien y son muy interesantes.

Otra cosa que me gusta mucho de Phyllis Dorothy James es que empezó tarde a publicar, todavía hay esperanza, aunque también casi llegó a centenaria. Seguramente es más fácil que llegue a centenario que consiga publicar tres libros.




Hubo un tiempo comunitario

Pero hemos huido de él. Yo no hice fiesta en mi boda, nadie pudo conocerse ni disfrutar con pretexto que yo propiciara, porque tampoco bauticé a mi hija, que eso era otra ceremonia comunitaria, y tampoco, obviamente, hubo comunión. Hemos participado en ceremonias teatrales, musicales y escolares, pero desde que la niña se hizo grande tampoco está por carnaval, ni por jalogüín (que no me gustan). También huimos de las fiestas locales, de la música atronadora de sus verbenas que nos pillan demasiado cerca de casa: aprovechamos para viajar.

No puedo quejarme de que desaparezcan los convocatorias sociales para juntar gente y compartir con ella. Yo soy un insociable en ese sentido. No me apetece gastar dineros en toros, ni tampoco perder horas en ir a misas ni procesiones, con motivo de las cuales en sus entradas y salidas que durante mi niñez fue anidándoseme  parte de mi sociablidad.

Menos mal que en este último semestre he ido a dos manifestaciones contra la amnistía.

"Lo importante es participar" se decía de los deportes frente a la obsesión por ganar. Eso sí que lo veo por aquí: hay maratonianos y corredores de otras distancias pedestres o ciclistas que hacen la fiesta de la participación, (hay cinco o diez además se conocen, que vienen a ganar) pero yo corro muy poco, tendría que esperar mucho el coche escoba. Me gustaría cantar en una coral, pero me cuesta otra vez volver a entrar en la de Béjar, hubo gente que parece que me miró, y me mira mal, por abandonarla en su día. Desde el Covid se perdió la tradición de la zarzuela, que me hubiera gustado.

Quisiera que se mantuvieran las fiestas y los ritos comunitarios, pero no estoy dispuesto a pagar un precio personal por ello, soy un comodón que va con los tiempos.

Ya se sabe "el que quiera peces que se moje el culo" yo soy de culo seco.

Es una lástima, me siento culpable, contradictoriamente culpable. 

jueves, 28 de marzo de 2024

Buena vista y mejor oído: Las Noches del Buen Retiro

 

Voy con paso decidido a por todos los Barojas de mi biblioteca. Esta novela de 1933 es muy buena, los trazos firmes y frescos de su escritura son de gran maestro. Es costumbrista, un poco moralista, de personajes muy personajeados, típicos de una clase media alta movidita; poco trabajadores, muy empeñados y dilapidadores,  románticos y cabezotas.., que han debido de conocerse o al menos columbrarse cerca o de lejos por la buena vista de su autor. El lenguaje es popular, por eso he escrito también lo de "mejor oído" en el título. (en algún momento he leído que Galdós cuando era viejo y famoso encargaba a alguien que se metiera en los ambientes populares para abastecerle de palabras nuevas)

Al principio tuve pavor de que me comieran los nombres que brotan como arroyos de montaña. Me decía: "tienes que tomar boli y papel para hacer un mapa de nombres, que te vas a perder, Juanito". No ha sido necesario, y no porque me sobre memoria, sino porque los arroyos desembocaron en unos personajes principales que se convirtieron en una cuenca fácil de identificar. Al final podríamos decir que el protagonista principal es Jaime Tierry, aunque la novela es un cuadro coral, un paisaje con figuras trasnochadas. Resulta moralista porque ajusta las cuentas, y los personajes trabajadores prosperan y progresan, mientras que los que no lo son se convierten en carne de tragedia novelesca predecible.

Me recuerda mucho a Galdós por su buen oído y oficio. También me recuerda su personajerío a Umbral, que odiaba a Baroja, a quien pone a caer de un burro en su libro Las palabras de la tribu. A Cela le gustaba mucho Baroja y a Heminguay también. Hay mucho personaje pintoresco del estilo de Cela y mucha facilidad de trazo narrativo del norteamericano.

No sé si Madrid le ha pagado la deuda a Don Pío, si es así debería abonársela en avenidas, estatuas, estaciones, porque es uno de los grandísimos escritores de la ciudad. Me gusta más su trilogía de la Lucha por la Vida y este gracioso cuadro de personajes del Buen Retiro, que todas las aventuras marítimas que prodigó tanto y que se  identifican como propiamente barojianas.

miércoles, 27 de marzo de 2024

¿Deberíamos haber hecho un viaje?


 Aunque solo fuera por llenar de colores esta página. Pero el frío, lo mismo que el calorazo, encoje el ánimo. Menos mal que hicimos el viaje de finales de enero y mi mujer luego ha ido a Valencia una semana; ya tenemos satisfecho el baño de imágenes correspondiente a este trimestre.

Primum vivere, deinde filosofare. Este refrán latino, que conozco desde mi adolescencia, "primero vivir, después filosofar", me está pidiendo más vida, y es que nosotros solo vivimos plenamente cuando viajamos, aplanando horizontes, abordando ciudades y pueblos, bebiendo sensaciones con avidez y todavía sorpresa, maravilla.

Escribo, leo, toco la guitarra, salgo a correr, compro, como, cocino, pero sabiendo que el vivere está más allá, con sus tensiones y sus deslumbramientos, que habrá un día en que no podamos por la falta de vigor aventurero y tenga que resignarme a la pasividad de los recuerdos almacenados. Me gusta la literatura de viajes, me gustan los documentales de viajes (sin perro, sin majaderías, que últimamente en la televisión española ponen algunos), me gusta reconocer.

Abomino de introducirme en las multitudes, disfruto los ambientes serenos, por eso los días antes a esta Semana Santa iba a ser el siguiente. Huiríamos a casa justo hoy, cuando se avecina la vorágine en todos los destinos de España, pero el tiempo húmedo y ventoso nos amilanó y aquí quedamos sin salir, viendo nuestro particular paisaje, ahorrando ganas para la próxima escapada.

Ayer nevaba así de bonito, y nosotros al calor del salón.



así está el huerto esta mañana cuando le entra una racha de sol.



os guardo este detalle de la nieve de ayer sacado de la misma foto, solo la he recortado pero con el mero recorte ya resulta tremendamente pictórica.


martes, 26 de marzo de 2024

La aceleración de la desagregación

En el año 1964 nací en un pueblo, en la casa de mis abuelos donde se asentaron mis padres al casarse. Vivían en ella mi abuela mi tía y mi tío, mi padre que trajo a mi madre que venía de casa de mis otros abuelos, y yo, que llegué a mi tiempo. Todos girábamos en torno a una lumbre baja que proporcionaba el calor durante el largo invierno castellano, y la cocina donde se elaboraba la comida todo el año. Éramos herederos del lar, el hogar romano, que a su vez vendría de la hoguera de los clanes familiares que hubiera antes. El fuego, su energía, su luz nos unieron durante siglos, allí las familias dialogaron y se contaron historias contemplando las brasas. Mas tarde mis padres construyeron una casa donde nacieron mis hermanos en la cual también comenzamos con una lumbre baja para calentarnos y cocinar. De ella se podían extraer tizones para un brasero que había que dejar reposar a la puerta para que no nos "atufáramos" con monóxido de carbono. Esto permitía llevar calor a los pies en otra habitación diferente de la cocina.

Un día de los años setenta apareció el gas butano. Esa comodidad marginó el centro de la casa. En verano ya no había que poner lumbre, bastaba girar la llave del gas y encender una cerilla para cocinar.

Emigramos a la ciudad en 1978. Allí no había lumbre, tampoco calefacción. Nos arreglábamos con un brasero eléctrico bajo una mesa camilla, estaba frente a la televisión que ahora era el centro de la casa, había una cadena y media que no emitía por las mañanas y desconectaba por las noches. La magia de la conversación mirando a los abstractos tizones se convirtió en información y entretenimiento elaborado lejos de nuestra casa. Pero todavía podíamos comentarlas en familia.

Tiempo después conseguimos un piso con calefacción en todas las habitaciones, por entonces ya había en casa radiocasetes y libros. Al poco comenzaron las televisiones privadas, y el mando a distancia para hacer fácil el cambio de canal. Las diferentes preferencias familiares y las alternativas hicieron que la ceremonia familiar se disipara. Los diferentes horarios ya motivaban que los días laborables no comiéramos juntos. Los domingos aún

Había aparecido el frigorífico, donde teníamos comida guardada, eso acabó con la disciplina de comer juntos. En algunas casas aparecieron pequeños aparatos de televisión en algunas habitaciones, la familia se disgregaba, la comodidad de no confrontar y discutir, y el egoísmo, triunfaron.

Mi hija cuando viene a mi casa se atrinchera en su habitación. En las pasadas vacaciones de navidad no vimos ni un minuto juntos la televisión. Cada cual mira su pantallita y abre el frigorífico cuando le da la gana. 

No cabe duda de que es cierta la teoría de que el universo se  sigue expandiendo desde el lejano "Big Bang"

lunes, 25 de marzo de 2024

Evolución involución frustración.

 El odio se produce por la frustración del amor: entonces da su salto de sapo el rechazo. Esta frase es de una novela inédita que presenté a un premio que no me dieron en el 97. 

Queremos algo o a alguien y nos aborrece, se nos cae algo al suelo, nos pegamos un pequeño golpe con el coche por no tener cuidado, y en la frustración brota violencia, ofuscación. Yo a veces grito y sé que no está bien, pero debemos dar gracias al grito que nos frena de hacer cosas peores. "Cuídame del toro manso, que del toro bravo ya me cuido yo". No sé si los españoles somos más o menos gritones que los otros habitantes del mundo, podríamos pensar que los italianos nos sacan la cabeza y que los portugueses no nos llegan a la cintura en cuestión de gritos. Pero esto lo digo por cómo hablan de ordinario. Nunca me gritó un italiano en la Roma del 2014 plagada de turistas, y tampoco me ha gritado un portugués las ya  difícilmente contables veces que he entrado a conocer ese amable país.

Supongo que cuanto más energías gastemos en los quereres, más estridentes reversos odiosos nos brotarán. Porque es una reacción inversamente o directamente proporcional. 

Como yo me enamoré de Barcelona cuando la visitamos en agosto de 2008, que fuimos correspondidos por la gente que encontramos, y nos sentimos "en casa", parte de la ciudad, la sentimos simpática y nuestra,  me duelen y me frustran todos los "feos" que nos hacen a los demás españoles, ese supremacismo  hacia los inmigrantes del resto de España que llegaron allí, que culmina el los procesos del "Procés". Hay evidentes odios cruzados.

La historia racial en nuestro país, como en el mundo en general, se va a empantanar. Este año ha nacido menos gente que nunca y muchos de los que han nacido son hijos de extranjeros cuyos padres son ajenos a nuestra cultura, (los que vienen de países hispanohablantes menos) y la mayoría no van a preservar nuestras tradiciones ni ningún idioma que no les sea práctico. Pronto nadie bailará jotas, ni llevarán santos a hombros, ni habrá público para los toros o la zarzuela. Todos los nacionalismos necesitan niños a quienes inculcar o acoplar valores nacionales. En España, nos pongamos como nos pongamos, no va a ser viable ningún nacionalismo. Los escasos retoños de ahora y los que vengan no es fácil que vengan dispuestos a cargar ni comulgar con nada. Existen millones de canales donde cada cual puede elegir sus preferencias en un mundo globalizado.

Por mucho que nos desagrade, esa es la evolución, líquida, que se escapa de todas las manos.

domingo, 24 de marzo de 2024

Fernando Fernán Gómez el Triste Triunfador



En todas las entrevistas que le escuché se quejó como cosa propia de lo mal que vivían y el hambre que pasaban los actores, y la gente de la farándula. No fue su caso desde la película Balarrasa. Fue un triunfador desde jovencito. Aunque su juventud coincidiera con la posguerra y la autarquía, trabajó en muchísimas películas, la mayoría como protagonista, pero como era alguien muy inteligente y creativo escribió mucho para el ABC, para El País, teatro, adaptaciones teatrales, disfrutó de mujeres espléndidas como Analía Gadé Maria Dolores Pradera y Enma Cohen.

Es uno de los grandes directores del cine español con El Mundo Sigue, Viaje a ninguna parte, 4.000 días juntos, El Extraño viaje. Para mí es comparable a Berlanga, a Buñuel, a Camús, a Garci, a De la Iglesia. y superior a Almodóvar. Ha sido multipremiado y multirreconocido hasta el punto de ser miembro de la Real Academia de la Lengua.



Sin embargo toda su obra es triste,  acaba mal, y esta última que he leído no es una excepción. Yo diría que cultivaba el "postureo triste", como los tangos, por cierto siempre tuvo la nacionalidad argentina. Era un anarquista, fue a la escuela de teatro de la CNT, no obstante tuvo el papel de Balarrasa, el régimen franquista, le dejó ser, hacer y destacar. Aunque una de sus mejores películas El Mundo sigue, cuyo autor es Zunzunegui, no tuvo recorrido comercial, ahí estuvo siempre, reconocida su valía en vida y en muerte con su nombre en uno de los principales teatros de Madrid.


viernes, 22 de marzo de 2024

A veces nos empecinamos en cerrar mucho los ojos a las cosas que se veían venir

 La cerrazón cerebral bloquea la percepción del peligro. Hay un personaje clásico que se llama Casandra que se opuso a que metieran el caballo de Troya en la ciudad, pero nadie quiso creerla. Era una agorera. Troya fue arrasada por los aqueos.

Un refrán muy típico es "quien mal anda mal acaba" pura tautología, que sin embargo tantas veces se desoye.

Nos pasa a la humanidad con el cambio climático, con el abuso de los teléfonos móviles, con el "procés" del separatismo catalán -en su día 7.000 empresas se deslocalizaron de allí-, ahora las inacabables cesiones del presidente Sánchez, todo va a más y llegaremos a la catástrofe. Después alguien nos dirá, pero ¿Cómo no lo visteis si estaba clarísimo? Yo veo bastantes cosas, pero nadie me hace caso, soy un Casandro.

Hoy pasaron por la televisión un documental escalofriante centrado de las familias de dos niños  de siete años enamorados del Michael Jackson. Era un ídolo universal y su ídolo infantil, los muchachos le imitaban desde pequeños, e infantilmente las familias no quisieron ver nada raro en darles el capricho de que durmieran en la misma habitación con él.

Las familias estaban entusiasmadas con que un personaje admirado por todos (hasta Fred Astaire dijo de él un día "me alegro de haber vivido para conocer a mi sucesor") hubiera elegido a sus hijos, australianos, y los invitara y agasajara sin tasa en un paraíso infantil llamado Neverland que parecía diseñado para engañar a padres incautos y terminar de maravillar a niños con su magia. Los dos protagonistas pasivos de la historia, ya adultos, están tocados en demasiados sentidos: reconocen todavía amar a su ídolo y sentirse cómplices de todo lo que sucedió contra su infancia: ¡de siete a once o a catorce años!

Parecido sucede con los teléfonos móviles en manos infantiles, pero si todo el mundo tiene uno, pero si son necesarios para cualquier cosa, la gente de mi generación y siguientes -adicta en su madurez- no se da cuenta de que son niños los que tienen esa ventana en sus manos, pero si con ellos se calman, pero así no dan guerra, pero.... ¡Con qué destreza los manejan! 

¿Quién maneja a quién? pregunto yo como acababa el relato de Cortázar del reloj.

El documental Never neverland es reiterativo, las madres de los niños (que los padres no han querido salir, uno se ahorcó) explican y justifican cómo no vieron lo que ahora es evidente, evidentísimo. Qué bien se torea a toro pasao. Las armas de destrucción masiva de Sadam.

Los teléfonos de ahora van a perjudicar con la vista de los niños, les proporcionarán además problemas de espalda, pero las cuestiones de percepción de la realidad y de dependencia psicológica serán también considerables.

Habrá gente que diga como con el cambio climático, "pero cómo pudieron permitir eso".

Los responsables de nuestros actos somos nosotros, para salvar al mundo, para salvar España, para salvar a nuestros hijos, para conservar nuestra cultura y también la cultura universal, nuestra salud, nuestros antibióticos, cada vez menos efectivos, etcétera.

En este tercio de mi vida que voy a empezar lamentablemente escucharé y diré muchas veces eso de que se veía venir.

Pero la gente se deja.

miércoles, 20 de marzo de 2024

Relojes

Había un dicho clásico para supervalorar este aparatito. Se decía de un pueblo de gente muy inteligente "El más tonto hace relojes". 

No entiendo la alta consideración de los relojes caros de la actualidad: los futbolistas invierten su dinero en ellos y por eso las bandas de atracadores violentan sus chalés. En las grandes ciudades hay gente especializada en robar relojes de "alta gama", a punta de pistola y en moto. Deben de hacerse de titanio de platino, de oro, no entiendo emplear estos recursos minerales en algo tan sencillo y accesible como la hora.

Cuando mi padre se compró su reloj, lo tenían pocos los mozos de su pueblo. Un primo suyo se lo llevó a la mili, para que le hiciera compañía, para que pareciera más importante que los otros quintos que no lo tenían, o para no tener que preguntar y, al contrario ser preguntado y poder "dar la hora". El caso es que mi padre y él lo recordaban como un gran favor. En muchas fotos antiguas, a las que soy muy aficionado, se puede observar gente con posturas extrañas para que, disumuladamente, se le vea el reloj.

De esta época es esta delicia de Julio Cortázar:

https://www.youtube.com/watch?v=oxMZ129dnt8&t=7s



Vuelvo a mi estupefacción. Hoy todo el mundo suele llevar un teléfono móvil donde hay siempre "buena hora". En tiempos de mi lejana juventud se preguntaba ¿tiene usted buena hora? En esa época los relojes adelantaban o atrasaban, pero muchas veces se paraban si no se era constante dándoles cuerda periódicamente. Un regalo típico en la comunión era un reloj, conmigo no lo hicieron. La verdad es que los relojes "de comunión" eran baratos porque un niño de siete años no era la persona más adecuada para llevar algo caro en la muñeca. Había niños a los que solo les dejaban ponerse el reloj los domingos.

Recientemente escuché que la presidenta Boluarte de Perú tiene algún problema de corrupción por los relojes caros. No lo entiendo: será porque ya no existen relojerías, sino joyerías donde venden relojes.

                                                ***

Nunca he entrado en una joyería. Mi padre siempre trabajó con metales, que eran tanto más valiosos  según sirvieran mejor o peor para cortar o tallar piedra, segar mies, partir leña...

martes, 19 de marzo de 2024

Hoy he descubierto el cielo donde me gustaría haber ido cuando querían que creyera en el cielo.

 De pequeño me dijeron que si fuera bueno iría al cielo, pero no me convencía un cielo lleno de viejas beatas y de santos torturados, un cielo aburrido donde no se podría jugar al fútbol porque regateando a un compañero como que le humillabas un poco y eso de humillar a la gente no era buena cosa.

Hoy he descubierto noventa años después que sí que había un cielo bueno, hermoso y divertido al que hubiera merecido la pena ir. Encendí la televisión y estaban poniendo la película "La alegre divorciada"; mal título para proponérselo a un niño que cumplía seis años en la España de 1970. Pero hoy lo he visto y me he quedado pegado a la pantalla de televisión. Vi primero un baile de Fred Astaire y Ginger Rodgers, y descubrí tal felicidad que creo que debería de haber sido enviado en el Voayayer 1 junto con la música de Bach interpretada por Glenn Gould hacia los confines del universo para que si alguien encuentra la nave y hace funcionar el artilugio reproductor que lleva viera lo hermosos y felices que podríamos ser en la tierra.

https://www.youtube.com/watch?v=ydxcHACwX4Y


Toda la película es un baño de felicidad blanca, elegante, suficiente, exultante, sin pretexto, la felicidad en espiral... estoy enamorado esta tarde, no sé si se me nota lo suficiente.

La mayor sorpresa al ver los créditos es que la película es de 1934. En España las izquierdas estaban disgustadísimas porque habían ganado las derechas las elecciones de 1933, y prepararon y ejecutaron la sangrienta revolución de Asturias y de Cataluña. Hitler llevaba un año en la cancillería de Berlín, Mussolini estaba ultimando la invasión de Etiopía o Abisinia. Poco después llegaría la espantosa guerra civil española, las noches de los cuchillos largos y de los cristales rotos de los nazis, las terribles purgas del paranoico Stalin, y la década culminaría en la segunda guerra mundial, los años más terribles de la historia de la humanidad y también de la ecología.

Me parece increíble que esta película  tan alegre no hubiera sido capaz de cambiar la historia, pero los Beatles no fueron capaces tampoco de enderezar a la humanidad con su alegría y hasta hubo un miembro de la humanidad que pegó cinco tiros a John Lennon solo porque le había negado un autógrafo.  

Creo que nadie cree ya en nada, solo cabe columpiarnos en fantasías a sabiendas de que lo son. 

La fantasía es una droga de las más sanas que se conocen. La música es otra, aunque también tiene efectos secundarios: yo ya padezco de acúfenos y debo administrármela con mesura.


lunes, 18 de marzo de 2024

Consejos de un sexagenario

 Duerme lo mejor que puedas, que podrás poco y mal, pero para no empeorarlo procura no discutir por la noche con nadie, ni calentarte la cabeza con debates políticos encarnizados.

Si eres seguidor del Atlético de Madrid vete a acostar pronto y ponte un CD de música para piano. Yo lo hice esta semana dos veces: la primera contra el Inter de Milán dormí perfectamente pensando que nos eliminarían (a la mañana siguiente me enteré, de refilónT y sin buscarlo, que habíamos pasado a cuartos y estuve todo el día contento como un tonto) Ayer también me fui con el CD y la mañana de hoy me han dado el disgusto del 0-3, pero he dormido bien. Soy insumiso al fútbol pero del Atlético de Madrid, ójala pudiera dejarlo.

Si no quieres chocolate no lo compres, pero si lo tienes en casa y te levantas de siesta, no trates de entretener tu deseo con otros alimentos más sanos, caerás en ellos y después en el chocolate también. Ahórrate el entretenimiento y engordarás menos.

Cuando estés sentado en una habitación y se te ocurra ir a buscar algo: apunta en un papel adónde vas. Lo normal que te suceda es que yendo a buscar esa cosa se te olvide, y ... termines abriendo la puerta del frigorífico a ver qué hay.                         Y picas.


Lávate los dientes después de cada comida seria o de caer en cada tentación que caigas. Voy a hacerlo yo ahora mismo, que acabo de comer pan con jamón y me resbala el saborcillo por entre los dientes y los labios. 

Apuntaré  ahora mismo antes de levantarme "me voy a lavar los dientes"


sábado, 16 de marzo de 2024

Novelas policiacas.

 Durante un tiempo universitario, muy influido por amigos de entonces,  me hice fanático de este género. Mi entusiasmo comenzó con El Perro de los Baskerville de Conan Doyle, después pasé al llamado género negro donde seguí poniendo en un altar a Raymond Chandler con su Largo Adiós como obra capital, tengo muchas de él y también una biografía. Me gustaban las frases ingeniosas y desafiantes de los detectives cuando les partían la cara, y esa narración entre cínica y autodestructiva en primera persona: pecados de juventud. En tiempos pensaba que era la verdadera literatura: entre social y costumbrista, debidamente salpimentada con un detective singular, que con su humor y reflexiones daba el máximo de entretenimiento instructivo.

Nunca lo he dejado. Leerlas es un buen ejercicio para desengrasar otras obras más pesadas o menos digeribles. Las leo con velocidad y como ésta se retroalimenta al final tengo que parar para no liarme ni perderme nada. En las dos últimas lo he hecho más conscientemente; podría haberlas acabado de noche esprintando un poco, pero dejé colgadas sus treinta o cincuenta últimas páginas. Al seguir en la fresca mañana he recogido sus finales con minuciosidad.


La verdad es que casi ninguna es lógica ni verosímil (no he leído a Agatha Christie, ni a Simenon a pesar de que tengo algunos libros de ellos en mis estantes), pero sí a multitud de autores y sus resoluciones no me suelen convencer, a veces hasta me enoja su final. Lo más interesante son sus presentaciones, sus ambientes, los personajes duros y blandos, insolentes, taimados... pero una de las reglas debe ser la ilógica y la sorpresa: tampoco me convence en el plano de la realidad Colombo, y mucho menos las películas de Hichckoock, sin embargo ambos productos son  estupendos.
"Un extraño en mi tumba me recordó a Vértigo", que es otra obra fantástica en sus dos acepciones basada en un libro de Boileau Narjerac, de quien tengo otra "Maleficios" leída dos veces después de ver vértigo en dos ocasiones. Tanto me recordó que me la he leído "Un extraño en mi tumba" pensando en la cara de Kim Novak. 
Hay muchos tipos de novelas de misterio policial; sigue siendo un género de éxito, como lo fueran las novelas de caballería precervantinas, lo que sucede es que ahora tenemos un mercado global, donde se hacen (o se hacían) también tiradas muy populares que luego acaban en los lances que yo recojo.
Con el tiempo se pueden releer las mismas novelas, porque en estos años mentales míos todo se olvida. Aunque barrunte el final porque lo haya sabido y olvidado, me sucedía parecido la primera vez que las leyera: siempre sospechas algo e intentas retarte para saber cómo se resolverá. Quizá sea la característica de este género: no te pasa nunca con una novela de Delibes, de Muñoz Molina, o de García Márquez.

Creo que este año hasta ahora he leído más libros que he comprado en 2024, me encanta avanzar en la jungla de mi biblioteca. A ver si algún día la dominara y justifico con conocimiento tanto viaje y escarceo por los baratillos de libros.


viernes, 15 de marzo de 2024

Capital humano

Una de las riquezas mejor repartidas es la gente. En todas partes nacen personas ingeniosas, trabajadoras, perseverantes y competitivas en cualquiera de los campos incluido el artístico. Muchos sueñan con hacer el bien a la humanidad, otros con enriquecerse, triunfar socialmente y ser poderosos, pero gracias a su empeño personal o colaborativo, las sociedades los países y el mundo prosperan (aunque también destruyamos a la vez la naturaleza) Amancio Ortega ha dado mucha felicidad y mucho trabajo, pero también Ford, Tesla, que era croata, Fleming, los bolis BIC, Leonard Bernstein, el Windows.. cientos, miles de personas que han iluminado nuestro bienestar y nuestra vida.

El mayor país capitalista de la historia, Estados Unidos, es tan rico porque atesora su capital humano autóctono, y a él le suma el capital humano y el talento del resto del mundo, Elia Kazan, Hitckock, Billy Wilder y otros mil cineastas, actores y técnicos, pero también tiene ahora a sudafricano Elon Munsk que es el hombre más rico del mundo y el añorado Stive Jobs, creo que era jordano o sirio o libanés.

Vienen a la mente grandes nombres; pero también personas más humildes van a la meca del capitalismo a colaborar y enriquecerse en la medida de sus posibilidades, pero todos o casi todos suman porque saben que tendrán premio. Yo soy amigo de Miguel Grillo Morales quien cumplió su sueño americano con empresas textiles, ganadería, inmobiliarias, y se gasta sus beneficios en subvencionar programas de radio y películas, además de vivir bien, que se lo merece y se lo ha ganado.

Cuba, de donde escapó, es un país comunista que exporta desde 1959 su mejor capital humano. Mi amigo Miguel Grillo y su esposa Rebeca y otros diez millones más que crean riqueza en otros lugares, el fundador de Telepizza también era cubano, incluso tengo idea de que los fundadores de Galerias Preciados y el Corte Inglés eran asturianos que huyeron de la revolución cubana para establecerse en Madrid. En Cuba ahora mismo no hay de na: apagones, carestías, derrumbamientos y basura sin recoger acucian estos días. Gran parte de la economía de la Isla se la facilitan los propios Estados Unidos desde donde emigrados de Cuba trabajan y mandan dólares. Esas personas llamadas "gusanos", que sufrieron actos de repudio (escraches) luego se acuerdan de su familia e indirectamente de sus vecinos que se benefician de sus remesas. 

Cuba se desangra de lo bueno y en esa isla se quedan muchos que no pueden irse, pero también vagos, deficientes y enfermos, y la proporción aumenta con los desmanes del mal gobierno que cada vez expulsa a más gente que pudiera ayudar a sostener su economía. Debe ser deprimente vivir en un país sin fe en el futuro, y no ver más que gente valiosa que se va, o otros cavilando cómo irse.

No nació, ni nacerá el hombre nuevo, el mito estajanovista que trabaja como un fiera en beneficio de la sociedad comunista. Sin incentivos no hay productividad. 

                                              Nadie se afana si se lo "afanan".

El sueño comunista cubano se queda en un sueño imposible (o peor: en una pesadilla). Mientras tanto incentiva capitalistas cubanos nativos que soñaron y sueñan con una realidad posible en el país del "sueño americano". O en el ENEMIGO, como les llama Silvio Rodríguez, que tiene un par de hijos que escaparon allí.

jueves, 14 de marzo de 2024

Mendelssohn



 Hay gente que alucina  con lo trabajador que es el tenista Djokovich, con la inmensas obras de Picasso o de Spielberg. Yo hoy estoy impresionadísimo con Mendelssohn porque el domingo pasado pusieron por la radio su oratorio Paulus, que interpretaban la orquesta y coro nacionales de España. ¡Qué preciosidad y qué obra más titánica!: dos horas de música genial que yo no sabía ni que existieran.

Tengo otro oratorio: Elías, que es más fácil de encontrar e igualmente impresionante. Félix Mendelssohn vivió solo 38 años, fue alemán, nació en Hamburgo, de origen judío, pero su familia se convirtió al cristianismo protestante cuando él tenía 16 años, ¡vaya!: resulta que también se entretuvo en toeologías. Compuso muchos salmos, que es música religiosa. Viajó a Reino Unido donde bien saben apreciar a los músicos alemanes desde Haendel, -también a Haydn-, por supuesto que viajó a París y conoció a sus grandes contemporáneos, ¡cómo no iba a viajar a Italia si tiene una sinfonía italiana! Tiene 70 canciones, dudo que mi admiradísimo, y también muy trabajador, Silvio Rodríguez tenga 300, pero es que Mendelssohn tiene 5 sinfonías grandes y decenas de sinfonías de cámara, muchísima música para órgano, piano solo, violín y piano violín y orquesta, piano y orquesta, salmos oratorios música para muchas obras de teatro, algunas óperas, el célebre Sueño de una Noche de Verano con la más famosa Marcha Nupcial junto con la de Wagner, que al principio le admiró y luego le odió por ser de origen judío. Los nazis prohibieron su música aunque parece que el propio Hitler tenía discos de él.

Es increíble lo mucho y bien que compuso este hombre en una época que había que viajar en diligencia y barco, sin todas las comodidades que disponemos ahora, a él le tendría que hacer ropa un sastre y un zapatero. Leyó mucho, escribió muchas cartas también, y reestrenó la Pasión según San Mateo de Bach.

A mí no me cabe en la cabeza cómo se podía hacer esto en 38 años. Solo con el precioso octeto de cuerda que compuso a los 16 años merecería estar en la historia de la música.

martes, 12 de marzo de 2024

Confesión

 

Aquí estoy yo en la última foto de cuerpo entero que me hizo mi mujer. Ha sido en Cádiz, recién aparcados a finales de enero, a punto de emprender la pequeña aventura de buscar alojamiento en un precioso hotel donde nos invitarían a presenciar un ensayo de carnaval que, como tantas manifestaciones culturales, cambió mi vida impresionándomela, ensanchando mi amor.
 
Me gusto en esta foto. Gusté a mi mujer y se la mandó en el acto a mi madre por guasap y mi madre también la alabó mucho en su respuesta.
Es el triunfo de mi vida, mi madre es feliz viéndome disfrutar contemplando sitios bonitos, me siento correspondido por  haber llegado hasta aquí con cincuenta y nueve años y un suficiente repertorio de sensaciones y conocimientos. 
Llevo puesta una prenda de entretiempo heredada de mi padre, ya estaba heredándole ropa en vida, y, ahora que llevo la bandera de su descendencia; muchas veces me digo, mira padre, qué lugares más bonitos te estoy paseando.

Al borde de los sesenta años no tengo ningún reproche importante que hacerme, (quizá no haber tenido más hijos, se me queda mucho amor filial sin repartir) ciertamente de niño prometía mucho, como todo el mundo, pero solo llegan unos pocos a cumplir: Piazzolla, Paco de Lucía, Luis Landero, Álex de la Iglesia, Messi...
Creo que me pasará como a todos vosotros a estas alturas. Hay demasiados caminos empezados, o que se quedaron sin empezar. Gracias a que escribo y fotografío me encuentro retazos de vida que hubiera olvidado. Como soy un poco exhibicionista llevo catorce años contándosolo a gente de varios paises y así compenso el que mi hija no me haga ni caso. Aunque confio (o quiero fantasear) en que en algún momento le entre curiosidad por saber cómo se mostraba su padre al mundo, su pequeño mundo.

Uno emprende hijos por amor, por el deseo de proyectarse en común con la mujer que ha elegido para ello, luego se da cuenta (yo al menos no me di cuenta hasta después) que también proyecta a sus antepasados y que los padres son muy felices reconociéndose como abuelos de sus nietos, pero nunca pensé en que fuera una inversión que tuviera que ofrecer rentabilidades periódicas de afecto. Bueno, el desafecto no me gusta, pero no tengo derecho, y lo recibido en la niñez y primera adolescencia es impagable y puedo consultarlo en fotos y grabaciones, además de mi memoria.

El único reproche de mi vida es haber dejado pasar el tiempo. No haberla jugado exprimida a tope como pasa con el fútbol de ahora, que no se dejan respirar desde el minuto uno hasta el final del alargue. Pero gracias a que me paré a reflexionar en cada horizonte, cada bosque y cada playa la he paladeado gustosamene.
 
A ver qué me llega en la tercera parte. Sé que vendrá lo malo y lo peor, pero aceptaré con alegría todo lo bueno que venga.

lunes, 11 de marzo de 2024

La cita es lo que vale

 


Voy a deshacerme de este libro sin leerlo. No es que tenga manía a El País, que la tengo por sus actualidades, pero también siempre me había fiado de sus productos; he conseguido muchos en el kiosko y, atrasados, en los baratillos que frecuento. La culpa no es de El País: reproduce un libro de Planeta que está mal traducido, las primeras hojas al menos; quien lo perpetró es un tal Roberto Bixio. Y, aunque el libro es prometedor yo descarrilé.

Me encantó la cita inicial de Maurice Maeterlinck, pero ya este nefasto traductor repetía innecesariamente una palabra que yo he cambiado.

Apenas expresamos algo lo empobrecemos singularmente. Resulta que nos hemos sumergido en las profundidades de los abismos y cuando volvemos a la superficie la gota de agua que pende de la pálida punta de nuestros dedos ya no se parece al mar de donde procede. Creíamos que habíamos descubierto en una gruta fabulosas riquezas y cuando volvemos a la luz del día solo traemos con nosotros piedras falsas y trozos de vidrio; sin embargo en las tinieblas relumbra aún, inmutable, el tesoro.

Muchas veces me despierto en la noche y manoseo esos tesoros, estoy a veces luchando por volver a dormirme, aunque últimamente ha habido ocasiones que salgo a escribir, pero entre que me visto, enciendo el ordenador saltando pantallas y contraseñas, y luego me lanzo a la plana blanca del procesador, ya se me ha escurrido casi todo el agua que traía en las manos, con lo que queda en el cuenco y la humedad trato de retener en letras aquellas ideas, pero no consigo hacerlo nunca, aunque sea lo mejor; cuando me vence el sueño, o me quiero sentir seguro de que lo recordaré mañana, entonces sí sale la cosa más insulsa, roma y defraudante.

Suelo escribir también, algunas veces, cuando corro. En este caso es instrumental: procuro concentrarme y así no me doy cuenta de cuánto me cuesta y cuánto me estoy cansando y lo que duelen mis tendones y pesan mis 89 kilos, es un truco que sé a la luz del día que es imposible de revelar, (positivar la fotografía) pues primero tengo que volver, después subir la cuesta, beber agua, quitarme la ropa, elegir ropa limpia, ducharme y encender el ordenador ..etc. Creo que queda algo y a veces lo aprovecho, pero el teosro de Maeterlinck sigue en la caverna de Platón.

Lo único concreto que sí saco es medio kilo menos en báscula, a cambio de hora y media de trote y hacerme quites con muchos trucos. En este caso lo que más suelo hacer es fantasear: es que contar los pasos y sentir los sufrimientos, y preguntarme ¿qué hago pasando frío y pisando chinarros a las ocho de la mañana? es masoquismo que mi mente no resistiría.



domingo, 10 de marzo de 2024

Una de buenos y malos

 Quien nos cae bien a nosotros es bueno; quien nos cae mal es malo. Hace poco escribí aquí, sin saberlo pero sospechándolo, que la Amazonía estaría peor hoy que con Bolsonaro. No tengo ninguna duda de las maldades de Bolsonaro, pero alguna bondad tendrá para muchos brasileños si que tuvieron que unirse todos los demás partidos contra él y aun así le derrotaron por los pelos.

Otra cosa es pensar que Lula iba a comenzar la restauración ecológica de la Amazonía, como se decía por aquí; o, siendo menos ambiciosos, a parar su destrucción como pulmón de oxígeno y reservorio biológico del mundo. Parece que no, que no puede o no quiere, según Luis Pancorbo que conoce bien la Amazonía y a los yanomamis desde hace bastantes décadas no le dejan, aunque no le culpa de ello. Pero le salva. Le pasa como a Pedro Sánchez que gobierna solo para quien le mandamás, y lo que prometieron Pedro y Lula es humo de pajas. 

(No quiero ninguna de las dos cosas, pero prefiero que se independice Cataluña a que la Amazonía se transforme en un vergel de maiz y soja transgénica y ganadería extensiva)

 https://luispancorbo.blogspot.com/

viernes, 8 de marzo de 2024

Pío Baroja "La feria de los discretos"



Termino de leer este libro agradecido porque me ha permitido hacerlo en dos días. Es una novela de aventuras de un hombre de acción, cuyo final no hubiera escogido yo pero me ha tenido en vilo y eso es estimulante.

Por otro lado, está muy bien escrito, mejor de lo que yo esperaba; con mucha agilidad barojiana, aunque repite algunas descripciones que serían brillantes si no se repitieran, por ejemplo, atardeceres; porque uno compara y se dice "esto me lo ha dicho igual, pero mejor antes". Me da la impresión, como pequeño escritor que soy, que este gran escritor no releía suficientemente sus novelas. Al tener éxito o al pensar que sus lectores le demandan le pasa un poco como a mí, que no releo lo suficiente lo que publico en este blog, últimamente estoy ansioso por "cumplir" todos los días, (ayer me fui a dormir con un cierto disgusto por no haber dado al "PUBLICAR" y hoy quizá me esté precipitando en hacerlo). El hecho de motivarse para el público tiene la parte buena de que uno escribe más, piensa más qué escribir, entonces se lanza a la piscina blanca de la pantalla del ordenador con una idea motriz que se queda divagante, o colgada, porque le atrapa otra y sigue soltándose en la siguiente y termina por no rematar, diciendo "de todos modos ahí queda eso" Y el ahíquedaeso no debemos hacerlo ni los buenos ni los malos, es mejor dar otra vuelta y que tenga un buen sentido lo que os ofrecemos.

Tomé esta novela que había iniciado en algún momento (lo he sabido porque había corregido alguna errata) aunque no me acordaba de nada de ella (esto empieza a ser grave, pero no me voy a distraer ahora con esta carencia de memoria) . Ha sido muy oportuno leerla porque sigo enamorado, por los dos últimos viajes, de Andalucía, y esta novela es una aventura que se desarrolla en Córdoba, con bastante prolijidad. He dormido en diferentes años en la ciudad califal, cuatro o cinco noches en total y conozco bien la plaza de la Corredera, la del Gran Capitán, el puente y la Mezquita, muchos patios y la plaza del Potro, y caminar por ese terreno con la emoción de la acción es más sencillo porque ya está en mi cabeza un esquema de calles y de colores por el que viajé en sus días y noches pateándolo y luego volví a reviajar al ver las fotos en el ordenador, y quizá también (además) al evocarlo cuando haya escrito sobre mis últimos viajes a Córdoba aquí. 

Aunque desde esta novela, que fue escrita en 1904, han pasado más de cien años, la ciudad histórica no ha cambiado como para que yo no acompañe a su protagonista por un lugar que reconozco.

Agradezco salir con Baroja de los ambientes norteños, marineros y madrileños, y también agradezco el esfuerzo de Don Pío en empaparse de expresiones andaluzas y hasta gitanas, he buscado la palabra "jindama" que es miedo o cobardía, y "terne" que es aquel que se jacta de valiente o de guapo, y hubiera debido buscar otras cuantas más, pero me ha servido el contexto y el que esté aún rebotándome en la cabeza el rico vocabulario del carnaval de Cádiz. https://www.youtube.com/watch?v=qxCKQWtRItI

El hecho de que no sea una novela del norte sino del sur hace que resulte más novela picaresca, aunque no reuna todas las características de ese género, pero algo hay. Recomiendo su lectura.

miércoles, 6 de marzo de 2024

¿Evolución-involución? 2

 La gente valora positivamente ser progresista. Yo he descubierto en el libro de Pinillos la palabra "regresista" y me he hecho regresista. Supongo que será por el abismo, al que me asomo, de los sesenta años Yo ya no puedo volver atrás porque la vida ya me empuja como un aullido interminable, interminable... Esto estaba escrito para una adolescente, para que no se suicidara ante las frustraciones que la vida la deparara; aunque quien lo escribió se suicidó a finales del siglo XX, siendo ya un viejo.

A veces por puro aburrimiento veo primeros planos de un programa de televisión que se llama Frist Dates, primeras citas, en el que se presentan muchos jóvenes de ahora, sofisticadísimos, bixexuales y muy promiscuos poliamores, la mayor parte dicen estar de vuelta de todo, exhibicionistas, malhablados y taqueros aunque la palabra mas repetida puede ser que sea "guai" lo cual indica lo niños inmaduros que son a pesar de sus pintas y categóricas afirmaciones. En mi pueblo las argollas que atravesaban el tabique nasal se las ponían a los marranos para que no hozaran en el suelo de la pocilga y lo rompieran, es decir, para que se hicieran daño al intentarlo. Hoy esto sería "maltrato animal". Si a alguien se le ocurriera tatuar a su perro o a su cerdo sería "maltrato animal" sin embargo ese programa está lleno de animales ¿racionales? automaltratados. A veces los ponen música y se ponen a bailar "bachata" y "perrean" que es algo así como agacharse la mujer y mover el culo circularmente como para que se las folle un perro, o un humano haciendo de perro.

A mí me parecen horribles, física y moralmente, nunca me iría a la cama con una chica tatuada o con argollas. (Ni con un chico tampoco) Soy un regresista.

He visto (porque fui a buscar a mi hija a las tantas) lo que hacen los chicos en las verbenas de Candelario. Todos tienen un montón de bolsas con bebida, y beben y beben mientras la música atruena, algunos saltan pero nadie baila. Se rompen vidrios, y se derraman líquidos anaranjados, azucarados y pegajosos.

Bailar era otra cosa. Incluso el baile suelto en corro que hacíamos en los ochenta en mi pueblo. Mis padres bailaban mejor que yo ¡qué regresista estoy!

Me gustaba llegar a una estación de autobuses o a una consulta médica, para charlar con desconocidos o para escucharles. Hoy todo el mundo mira a una pantalla. Ni puto caso a los humanos que les circundan. Silencio sepulcral en el que solo se escuchan los avisos de guasap. ¡Cuánto echo de menos los trenes con departamentos en los que nos sentábamos frente a frente seis u ocho personas!, ¡qué buenas conversaciones se tenían! Aquello era más humano, infinitamente más humano. En este siglo todo lo vamos a conseguir a golpe de click.

Ayer en Francia han aprobado que en la constitución esté el irrenunciable derecho al aborto. En el siglo XX se luchó por eliminar la pena de muerte: La sociedad no puede elegir eliminar del cueprpo social a personas que matan a otros y una madre puede elegir eliminar a un inocente, de su cuerpo (este es real y no figurado) 

Yo soy regresista: no me gusta casi nada lo que hay, y menos lo que viene.

martes, 5 de marzo de 2024

¿Evolución-involución? (1)

 Leo La Mente Humana de Jose Luis Pinillos. La ciencia nos ayuda a las personas corrientes a reflexionar sobre los datos acumulados y deducidos por los estudiosos más serios y dedicados. Desde que la filosofía se independizó de la religión hasta finales del siglo XX todo han sido avances. Dudo mucho que en el XXI no hayamos experimentado o vayamos a experimentar una involución.

La hominización. Etapa Final, nos la enumera el científico con los siguientes pasos: Bipedismo, Liberación de las manos, Telencefalización, y 

NACIMIENTO INMADURO. El ser humano es el que viene a la vida más indefenso y más necesitado de un largo periodo de cuidados y adiestramiento. (..) Debido a esto y a la capacidad de asimilar las tradiciones culturales, la socialización del ser humano es tan profunda y sus instintos cuentan tan poco en su vida normal de relación.

Hasta el siglo XX los humanos aprendíamos de la familia que nos enseñaba a lavarnos, pero también a coservar el agua, a cocinar y además a no desperdiciar lo cocinado que era costoso de conseguir y elaborar, a recolectar, y a arreglar, también nos contaban historias próximas que nos servían de lección. Nos enseñaban y aprendíamos a comprender y a vencer las dificultades mediante el trabajo. Los bienes escasamente se encargaban y menos aparecían mágicamente a la puerta a cambio de una firma de recepción.

Porque sobrevino un salto la electrónica que se complicó en informática y ahora estamos cayendo en eso que llaman inteligencia artificial. Casi nadie en el mundo sabe cómo funciona o cómo arreglar un problema informático: resetean y introducen un nuevo programa o lo reinstalan. Bajan una APP, pero las tripas nadie las conoce, de hecho al estar "impresas" son indesmontables, inarreglables.

La humanidad puede devenir inarreglable, porque de pronto tenemos todo a nuestro alcance pero no sabemos cómo llega, ni cómo ha llegado, hay muchos, demasiados pasos perdidos que nos son desconocidos. Hace veinticinco años los sabios informáticos estaban "acojonados" con el efecto 2000 por el que las máquinas podrían no haberse programado preparadas para cambiar de milenio y algo podría fallar, entonces estaban buscando (los encontrarían supongo) programadores de los estadios previos Cobol Basic Pascal, etc y otros conocimientos "obsoletos" por las que empezó la informática décadas atrás. 

La cuestión actual es tan peliaguda que si se va la luz en un hipermercado, o se estropea la informática, nadie podría vendernos nada porque no conocen los precios, y quizá tampoco sepan ni sumar la cuenta caso que los conocieran. Los tenderos de antes con el lápiz en la oreja eran unos fenómenos de la aritmética.

Recuerdo la magnífica primera película de El planeta de los simios, donde éstos encontraron en una cueva los aparatos humanos que no habían sido capaces de desentrañar porque ellos llegaron al poder sin haber inventado nada. Poco más o menos sabemos ahora, caminamos a hombros de gigantes, pero desconocemos cómo lo hicieron.

Unos niños de Almendralejo, (un pueblo por el que paso cada vez que voy a Andalucía o el Sur de Portugal) utilizaron inteligencia artificial para "desnudar" a sus compañeras de clase. No se preocuparon de hablar con ellas ni de seducirlas, ni siquiera de espiarlas. Usaron un atajo para obtener la imagen de sus cuerpos, (dentro de pocos años tridimensional  y hasta palpable virtualmente) para tener relaciones sexuales con ellas, lo que a mí me costó diez años y muchos aprendizajes aledaños.

Pero mañana escribiré más sobre este tema.

lunes, 4 de marzo de 2024

"Los hombres duros no bailan" de Norman Mailer

 He estado leyendo el libro con la cabeza confundida en que su autor había estado casado con Marilyn Monroe. La Wikipedia me lo desmintió tras consultarlo a las cien páginas, el guapo escritor era Arthur Miller. Como esta novela está pringadísima de sexo, mientras yo pensaba que este Mailer había sido un marido de Marilyn, se me iba la mente a las yemas de sus dedos rozando a esa mujer que hacía y se dejaba hacer tantas cosas. El libro está publicado en el 85, veintipico años después de la muerte del mito sexual. Narra de todo,  sin preservativo, y sin luces especiales o planos al perrito bebiendo leche. Sin transparerencias edulcuradoras, con pelos impúdicos y recorriendo las señales más recónditas, no como en Hollywood que las mujeres se levantan y no hay manera de que las sábanas dejen escapar una teta por mucho movimiento y giros que se den.

Es una novela para adultos, bien madurados; café cargado sin azúcar, sal gorda, orujo, chocolate con cacao al 110 %... con mucha pintura viril y fogosamente aplicada como los cuadros a espátula, o los de Van Gogh. Siendo así contiene imágenes literarias muy rugosas. La trama ya es más difícil de creer pero no importa, ¿acaso es creíble la trama de Casablanca, o la de Con la muerte en los Talones, o Retorno al pasado?. Son cuadros es pintura, pintura literaria como E Juicio Final o el Cambio de Guardia o la Balsa de Medusa son golpes estéticos. Pero estropea la faena con la espada: mata mal y no le concedo más que vuelta al ruedo.

Aunque al final aparece un padre con mas cojones todavía que el hijo. Pero, ya lo he dicho, lo jugoso de la novela está en las imágenes del principio.

Nos peleábamos como el perro y el gato, pero me consolaba pensando que al menos había derrotado al tabaco. ¡Vana esperanza! Dos horas después de la marcha de Patyy saqué un acortador de vida de un paquete que se había dejado olvidado, y al cabo de un par de días de dura batalla volví a fumar como un carretero.

Lo único que subrayé en mi libro fue este recuerdo marino

sus bajíos todavía brillaban al amanecer con la húmeda y profunda inocencia de la tierra que recibe la caricia del sol por primera vez

domingo, 3 de marzo de 2024

Recupero este artículo, que me fue censurado en 2013.

 Lo censuró mi mujer, pensó que no me convenía que alguien pudiera leerlo. La gente no termina de entender las cosas que quiere entender a medias, y anticuerpos de SIDA suena muy mal. También sucede que para entrar a trabajar en el sector público te piden un certificado de que no padeces enfermedades infecto-contagiosas, pero ahora no me importa nada esta información. 

Estaba trabajando en un Juzgado de Salamanca por aquellos entonces, y me sentaba en el autobús con los africanos que iban solos, porque nadie lo hacía, y para hablar con ellos, por ahí atrás andan mis artículos al respecto.



NO SEA QUE A ALGUIEN LE PASE UNA COSA ASÍ

Soy donante de sangre, ya lo tengo escrito por ahí atrás. Me parece que serlo es de buenas personas; agradecidos tanto por nuestra salud, que la regalamos no importa a quién. Tres o cuatro veces al año durante casi ocho años, he sentido ese placer de dar, esa liberación de una obligación moral hacia el prójimo y la recompensa de hacerlo entre personas escogidas por ese espléndido sentimiento, como yo. (Los otros donantes que me parecen tan dignos de admiración)

Durante todos estos años, primero por carta y después por SMS, me comunicaban que no tenía hepatitis, ni SIDA, ni  alguna otra infección que hiciera que mi sangre fuera inválida o mi salud pusiera en entredicho. Al contrario, tres o cuatro veces al año me reafirmaban lo saludable que era en estos aspectos que pueden analizar, (para haberme medido el azúcar o los triglicéridos habría debido de “ir en ayunas”).

 

El 28 de febrero de 2013 recibí una carta certificada con acuse de recibo:

En su última donación de sangre hemos observado una alteración en los resultados de los análisis realizados. Cabe la posibilidad de que sea debido a errores de la técnica efectuada, por lo que es preciso comprobarlo repitiendo el análisis con una nueva muestra.

(...)

Por motivos de confidencialidad, no podemos dar ninguna información sobre resultados analíticos por teléfono . (...)

 

Aprovechando mi pausa para el café, acudí al centro de Donantes de Salamanca, que no está lejos de mi trabajo.

 

Yo pensé que podría tener hepatitis, de la que sé muy poco, ya que no había realizado prácticas de riesgo de infectarme de SIDA, (si es cierto que se transmite por las vías que siempre han dicho que se transmite). En el centro de donantes, la médica, previa breve explicación, me dijo que en el análisis “barato” que  hacen, un reactivo había identificado que yo tenía anticuerpos del SIDA, pero que iban a tomarme en ese momento cinco tubos para hacerme un análisis más completo que descartara o afirmara rotundamente si lo tenía o no. En cualquier caso, -me seguía informando- mi material genético daba negativo, de manera que aún no había desarrollado la enfermedad.

Añadió que el nuevo análisis tardaría unas dos semanas en dar sus resultados, pero que no tenía que preocuparme si no había realizado “prácticas de riesgo”. La única que había podido realizar fue una glucemia que me hice en una farmacia de Salamanca, también en los 20 minutos de café, -que me costó 5 euros, ya que no  podía acudir al Ambulatorio de Béjar que no abre por las tardes, además de que no aguanto en ayunas una mañana entera-. En ese análisis de la farmacia no vi quitar ningún precinto, ni plástico, al instrumento con el que me dieron un picotazo, y... la mente es libre  de dar vueltas sobre si con ese mismo pincho no habrían picado a un infectado de Sida que fuera a hacerse aquel otro tipo de pruebas, que también publicitaban en el escaparate del establecimiento.

 

¿Cómo voy a tener yo tan mala suerte? Sinceramente, estadísticamente, he pensado que no: que sería no un problema de mi sangre, ni de aquel pincho, sino de los reactivos del Centro de Hemoterapia y Hemodonación de Castilla y León; pero durante un mes, hasta hoy 3 de abril, yo he sido por un análisis clínico: positivo de anticuerpos de SIDA. Y eso es injusto. Me he privado de tener relaciones sexuales y he tenido que soportar las veladas dudas de mi mujer, que no podía estar tan segura como yo mismo de que no fuera un verdadero positivo, máxime teniendo en cuenta mi tan raro entusiasmo por mantener conversaciones a corta distancia con negros subsaharianos (y darles la mano efusivamente al final).

 

En carta fechada en Valladolid el 1 de abril de 2013 me dicen:

 

En el análisis realizado se observa una falsa reactividad persistente. Esto no tiene NINGUNA IMPORTANCIA PARA SU SALUD, aunque no puede donar sangre por interferir en las pruebas que realizamos a las donaciones.

 

Y remachan en el siguiente párrafo.

 

Esta falsa reactividad se debe a un fallo de la técnica analítica (equipo y reactivos empelados para el análisis), no tiene ninguna relevancia para su salud, y no tiene que hacer ningún tipo de prueba adicional ni revisiones por este motivo.

 

Soy confiado y quiero pensar no que tengo una sangre “un poco rara” que provoca la falsa reactividad persistente, sino que hemos entrado, con los recortes sanitarios, en una nueva era de reactivos baratos que saltan no a la mínima, sino a la inexistente.

 

Me molesta, me ofende por mi sangre tan viva, tan generosamente ofrecida desde que decidí ser donante, esa sangre que repartía vida y salud, que ahora se quedará en mis venas sin ayudar a nadie más. También me ha molestado lo burocráticamente que han tratado mi caso: podían haberme “tranquilizado” en poco más de dos semanas, pero ha pasado más de un mes: quince días de más me han tenido “en vilo”. ¡Menos mal que yo no había tenido prácticas de riesgo!

 

Y todo sólo por ser bueno, generoso, altruista...

Quiero escribirlo por si a alguien le pasa, que no se preocupe, que a mí no me ha pasado nada. De corazón, sigo siendo donante de sangre.



NO TENGO EL SIDA, NUNCA LO HE TENIDO, PERO DEJÉ DE SER DONANTE DE SANGRE ENTONCES Y NUNCA LO HE VUELTO A INTENTAR.


sábado, 2 de marzo de 2024

Vamos de culo

No había nacido yo cuando la crisis de los misiles de Cuba. El envite de Kruchev fue respondido por un órdago de Kennedy. Silvio Rodríguez estaba haciendo la mili en su país y en una guardia que le tocaba le recomendaron que no mirara si estallaba alguna bomba no fuera a quedarse ciego. 

Aquello fue serio: los barcos de guerra estadounidenses bloquearon (entonces sí) la isla de Cuba para impedir que entraran más piezas para los misiles que se estaban montando. La tensión dio un paso atrás: los americanos se envainaron otros misiles que tenían en Turquía y se instauró el "teléfono rojo" p'a por si acaso...

Putin ha amenazado en los dos últimos años dos veces con misiles nucleares, una a Gran Bretaña y otra a Francia, o a toda la Unión Europea, ante el reciente amago de Macron.

Creo que desde hace varios años los españoles como miembros de la Otan tenemos soldados, tanques y aviones en Letonia para ponernos en frente.

Dos octogenarios pelearán por la Casa Blanca. Yo, a mi madre que tiene 83, la conminé a vender su coche porque aún quería usarlo cuando, de verdad que eso no es razonable. Aún se defiende pero hay mucha gente de su edad encerrada en una residencia. Estos dos señores que van a tener la responsabilidad de manejar la todavía primera potencia militar y económica mundial, espero que estén muy bien apoyados o asesorados porque no son años. (yo con 59 una de cada tres veces que me levanto a ir a por algo cuando llego adonde está ya se me ha olvidado, -y lo peor es que lo remato parando por el frigorífico)

China se las tiene con Taiwan y también envida fuerte. Irán es un enorme país que produce los drones más peligrosos que tiene Rusia para castigar Ucrania. Y parece que están enriqueciendo uranio (vamos a ver)

Menos mal que desde que entró Lula se estará recuperando la Amazonía (no me digáis que no, que me lo estoy temiendo)

viernes, 1 de marzo de 2024

Cabeza de playa

 


Encuentro esta expresión en la novela que estoy leyendo titulada "Los hombres duros no bailan" de Norman Mailer, y no tiene nada que ver con esta playa de Ribadesella que fotografié hace tres o cuatro años (el tiempo pasa de tal manera después del COVID que tendría que consultar mi blog para saber cuándo estuvimos por última vez en Asturias). 

Una cabeza de playa es un término militar que suena a desembarco violento y establemiento con uñas y dientes en el terreno ocupado para defender y permitir la llegada más tranquila de otros desembarcadores y emprender todos juntos la conquista de un territorio al que no se podía entrar de otra manera. Me da por pensar la inmensa suerte a lo largo de mi vida de no tener que mojarme los huevos en un desembarco, y avanzar helado, torpe y calado de pesada agua salada entre las balas o los cañonazos de los defensores de la playa. Continúo, pensando en los militares que a veces mandan a gente a hacer esto como una maniobra de distracción al enemigo, sacrificando gente (peones de ajedrez) para que se avance en otro lugar desde donde se ganará la guerra más facilmente. Reflexiono sobre las guerras y la poca importancia de las vidas individuales en nombre de la estrategia.

Los conflictos bélicos más famosos de la actualidad son los de Ucrania y Gaza. Los ucranianos, por los que han pasado tantas veces por encima los rusos, saben por qué luchan y es posible que se sometan a mojarse los huevos, y hasta a hacer de peones. Los rusos no sé si tanto: perdieron su imperio tras la derrota de Afganistán (donde murieron muchos ucranianos también por la geopolítica de la guerra fría). Un poco antes los norteamericanos pobres, los que fueron obligados y no supieron escaquearse en los 60 y 70  de ir a Vietnam, también se preguntarían de qué y por qué eran peones de una guerra en el sudeste Asiático. Los vietamitas sí sabían por qué luchaban y ganaron, los civiles americanos consiguieron que a partir de entonces el ejército fuera profesional y que nadie que no hubiera firmado un contrato tuviera que someterse a ser peón. 

Creo que los israelíes, que son muy listos (gran escritor Norman Mailer, judío) sí saben por qué luchan porque  tienen muy presente que los nazis los mataron como corderos en el año 1.944, y que si se hubieran defendido por lo menos habrían muerto menos y de otra manera y conocen que si no reaccionan con suficiente violencia serán echados de donde viven hace bastantes décadas ya, incluso reciben judíos rusos y argentinos que huyen de su maltrecho país a uno más potente y mejor dirigido.

Miro esto desde fuera. Nadie me ha obligado a tomar ningún riesgo armado ni a matar para conquistar una cabeza de playa. 

¿Por qué cabeza si es la parte más inteligente del cuerpo?, quizá porque sea la cabeza lo primero que sale en un parto humano para conquistar la vida, se me ocurrió ahora mismo. No sé, pero una cabeza es donde se elaboran los pensamientos y lo que pasa en una cabeza de playa en los términos que la empleamos es bastante irracional.

Como especie nos acercamos a terminar el trago del primer cuarto del siglo XXI. Recuerdo que en la lejanía pensábamos que en el redondo año 2.000 viviríamos felices, rodeados de limpios robots y platillos volantes, sin humos negros ni mierdas de guerras estúpidas, egoísmos, manipulaciones, supremacías étnicas, violencias, destrucciones. 

Llevo escuchando mucho tiempo que las bacterias se están haciendo resistentes, las estamos entrenando para hacerse resistentes a nuestros antibióticos. El toro nos cogerá a todos como el COVID y el cambio climático. Yo no llegaré al dos mil cien pero tampoco me da la impresión que entonces seguirá siendo una quimera que la razón gobierne nuestro planeta. A ver si para el 3.000 hay en España algo más que bacterias, que pueden estar tomando una cabeza de playa mientras estamos desprevenidos usando antibióticos sin ton ni son y sin armarnos (prepararnos) para después.