viernes, 9 de octubre de 2020

Un anacrónico cono antropológico.

 Estaba mirando en un lugar donde compro libros de segunda mano y vi este artículo.



Es un plato de la virgen de Béjar: Nuestra Señora del Castañar. No tiene nada de particular, es igual a la mayoría de las vírgenes españolas de pueblo o de comarca, solo se diferencia la leyenda que se pone debajo.
Pero ¿por qué es un cono sin formas femeninas? nos concierne a  nosotros que venimos ya del siglo XX del mundo de Angelina Jolie o Beyoncé, o de Marylin con las faldas levantadas. (representaos ahora que pasa el metro por debajo y se levantan los faldumentos de esta virgen) 

¿Cómo puede funcionar esta anacronía estética en los momentos de culto al cuerpo femenino?

Voy a responderme antropológicamente que la virgen representa a la vieja madre que se ponía un pañuelo para salir de casa, que no llevaba nunca el "pelo suelto" cosa indecente como Rita Hawwoed en Gilda, (los musulmanes no en vano estuvieron ocho siglos por aquí)  a la madre abuela respetable, a la que se llamaba de usted, de la que no se concebía ningún color, ni ningún deseo, absolutamente carente de obscenidad y de malos pensamientos, que no se ducha ni se baña en espuma, ni tiene escote, ni glúteos redondeados: una ducha fría para la libido eso eran esos conos icónicos.

Para más abundancia observo es el cono inverso al del vello púbico.

Es la madre cuando nadie decía esto es "de puta madre" para expresar lo superlativamente bueno.

Pero este cono puede parecerse al triángulo de dios, no en vano es posible que sea la mujer de dios padre, la madre de dos hijo ¿pero es una mujer?



Este tampoco es el icono de la mujer actual, pero es curioso que siendo todo tetas y culo sea también triangular si le prolongáramos con una falda. 

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