Cuando yo era adolescente se llevaron mucho las botas camperas; los "botos" también se llamaban. Las llevaban al colegio de San Esteban los más ricos de los pueblos (según los tenía conceptuados yo), o los más gastadores. Nunca me atreví a pedirlas, como tampoco pedía pantalones LEE o Lois, que valían entonces 1.600, frente a los Larri que me compraba mi madre por menos de la mitad. (por cierto a los Larri los llamaban La risa del barrio)
Las botas camperas se elaboraban en Valverde del Camino. Hoy sigue habiendo fábricas, incluso se ofrecen a hacer el calzado a medida, según pude leer en algunos talleres. En la plaza mayor está el homenaje a la costurera casera, las que que supongo que, previa instrucción, se llevaban las piezas de cuero y las cosían para la fábrica a cambio de un tanto por unidad. Esto se ha hecho mucho en la industria textil: en mi pueblo también se cosían algunos guantes de cuero; aunque se cosían sin necesidad de máquina, porque era cuero fino.
Valverde también fue minera y exhibe la casa inglesa del director de la mina, diferente, como isleña, separada y dominando el pueblo desde un alcor.
Hablé con un viejo, que es quien nos recomendó esta visita, (hoy es un museo pero estaba cerrado por lunes) y también me dijo que se estaban volviendo a explotar minas de cobre en la zona, porque había subido el precio internacional y ahora era otra vez rentable.
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