jueves, 24 de febrero de 2011

SOY DONANTE DE SANGRE Y ES ALGO QUE ENGANCHA.


Desde el 7 de julio de 2005 soy donante de sangre. Aquel día, que coincide con los atentados en el metro de Londres, descubrí que tengo malas venas para hacer puntería con una jeringa.No acertó la enfermera, picándome en el brazo derecho. Después se desquitó, acertando en el izquierdo. Se me ocurre ahora que “la izquierda es más solidaria”, será por eso, o porque está más cerca del corazón. Nunca he tenido problemas con la izquierda.
Comentaré que no soy capaz de mirar como me pinchan. No he visto a nadie que se mire mientras le clavan la aguja. Sin embargo, sí soy capaz de mirar como pinchan a los demás, mientras abro y cierro el puño. Otro ejercicio político: no me importa que se la den a un fascista o a un comunista. Me alegro de tener buena salud y la comparto. Es un placer, un orgullo.
También lo es la gente que dona. Saber que estoy haciendo cola con personas escogidas, que como yo, son capaces de perder una media de 40 minutos entre la espera, la consulta médica, la donación y la recuperación y después llevar, durante dos o tres horas más, un apósito con esparadrapo, te reconcilia con el ser humano. Supongo que llevaré unas 20 donaciones; sacan un poco menos de medio litro, por consiguiente he donado algo menos de 10 litros de sangre: dos garrafas de cinco litros.
Tiene que ser un buen trabajo extraer sangre. Las enfermeras y enfermeros siempre están de buen humor y los donantes nunca nos quejamos de nada. Todo es educación y generosidad. Si me dan a elegir un grupo humano al que pertenecer es el de los donantes de sangre. Probadlo, se siente uno muy bien y además, engancha.

4 comentarios:

  1. Totalmente de acuerdo. Donar (sangre o lo que sea) es un acto de generosidad que te reconcilia.
    Yo también pertenezco a este grupo, el de donantes (de sangre, de órganos, de médula, de lo que se pueda...)y lo considero como algo tan normal que me sorprende cuando alguien te pregunta extrañado si eres donante.
    Por suerte yo tengo unas venas a prueba de aprendices, y me da igual donde o quien me pinche.
    Soy donante desde que tuve edad, porque mi madre lo ha sido siempre y es el ejemplo que hemos seguido en casa.

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  2. Hola Juan:
    Gracias por tu relato y reflexión de donante de sangre.
    Estamos acostumbrados a contabilizar, medir y capitalizar todo lo que hacemos y nos sorprende que mantengamos una actividad como esta que es DAR sin recibir nada a cambio.
    Y como bien dices hay que perder tiempo, soportar pinchazos, esparar que todo salga bien, que a pesar de los buenos profesionales, no siempre todo sale perfecto y el pinchazo o pinchazos, estar enganchado y soportar la tirantez de un esparadrapo durante unas horas... todo son problemas, perdida de tiempo, de sangre y todo GRATIS.
    Esto en un mundo como el nuestro, es algo que no se entiende a primera vista.
    Yo también fuI donante, no te puedo decir cuantos litros done; como canta Perales: "el amor no sabe contar”. Sí que te puedo decir que como tú tuve que esperar turno, que más de una vez me salió un ematoma que me duró una semana, que era molesto el esparadrapo y el tirón último con la depilación dolorosa incorporada… pero que es todo eso con la vida que das a otra persona: NADA
    Ya no puedo donar sangre, tengo un tumor maligno en mi sangre que la hace envenenada, pero en medio de esto llevo viviendo seis años GRATIS, a medicamentos y a que me han realizado dos transfusiones sanguíneas. No te puedo decir de quién era si de hombre o mujer, no sé su raza, credo ni ideología, si le sacaron la sangre de la mano derecha o la izquierda.
    Lo que sí te puedo decir, que si sigo vivo es por uno o una como tú que son de corazón donantes de sangre. Para mí el verbo DAR, hacerlo GRATIS y de forma ANÓNIMA me hace vivir y sentirme más humano, hermano de todos y esperanzado que otro mundo puede ser posible.
    Un fuerte abrazo y gracias por tu sangre dada y la que corre con más fuerza cada día en tus venas.
    Teodosio Sánchez Sáez

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  3. Me ha encantado leer tus palabras.Hoy es la primera vez que he donado.Nunca pude por que pesaba poco,así que ahora ya como estoy mas rellenita he aprovechado.Mi sensación ha sido igual que la tuya,yo me lo he pasado tan bien,que he acabado haciendo la bicicleta con los pies con el compañero de en frente,IMAGINATE.Las enfermeras se partían.Ha sido mi primera vez y espero que sean muchas mas.Todos los que puedan,deberían hacerlo.Un saludo para todos.:)

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  4. ¡Qué hermoso es compartir el lado bueno de la humanidad! Gracias. Sólo los "iniciados" podemos comprender bien esta belleza del alma que es darse generosamente.

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